Sus Majestades los Reyes se reunieron en la mañana del martes 24 de junio (sólo cinco días después de la proclamación de Felipe VI) con una amplísima representación de las asociaciones, entidades y ONG de carácter social, que tienen por misión ayudar a quienes más lo necesitan, a los que tuvieron la oportunidad de agradecer su labor que se ha convertido en mucho más determinante debido a la crisis económica. Entre los más de 300 representantes de entidades sociales que estaban presentes, se encontraba -acompañado por la vicepresidenta 2ª, Teresa Palahí- el presidente de la ONCE y su Fundación, Miguel Carballeda, que ya tuvo ocasión de felicitar al monarca el día de su proclamación.

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 "La foto de la solidaridad”

En su intervención ante los representantes de 190 organizaciones sociales, don Felipe quiso resaltar su interés y el de S.M. la reina doña Letizia en que “uno de nuestros primeros actos como reyes sea este encuentro, con una representación amplia, aunque sé que necesariamente incompleta, de personas -de organismos públicos, ONG, asociaciones- que, en todos los campos, os dedicáis con esfuerzo y generosidad a ayudar a los más débiles y vulnerables, a los que más lo necesitan. Sois aquí la foto de la solidaridad en España, la imagen de miles de personas que en nuestro país trabajan en atención o servicios sociales y cooperación”.

Y añadió: “vuestra labor merece, sin duda, ser más conocida y reconocida. Y tiene una doble dimensión que hoy deseo subrayar muy especialmente”, señaló el nuevo rey Felipe VI. “Por un lado, los valores y principios que os guían y que son algo que lleváis dentro, que está en vuestros corazones, en vuestra forma de ser: la generosidad, el altruismo, la empatía… la solidaridad. Sin duda os enaltecen como individuos, como hombres y mujeres íntegros comprometidos con vuestra sociedad". Y añadió: Enhorabuena por ser así y por el ejemplo que dais a todos”, afirmó.

Por otro lado, el rey quiso destacar “el impacto social que deriva de ese compromiso y que tiene un efecto extraordinario en la vida de muchos miles de ciudadanos en España y en otros países del mundo. Vuestra tarea es eficaz, tiene resultados tangibles y concretos que alivian la situación de numerosas personas. Favorecéis, en suma, a la sociedad en su conjunto”.

La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, y el secretario general de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Gonzalo Robles, acompañaron a SS.MM. los reyes en este encuentro, celebrado en el Palacio Real de El Pardo, con representantes de entidades que se dedican a la solidaridad, los servicios sociales y la cooperación.

Entre ellos se encontraban también el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), Luis Cayo Pérez; Luciano Poyato, presidente de la Plataforma del Tercer Sector; Juan Antonio Pedreño, presidente de la patronal de la Economía Social; o el padre Ángel, presidente de Mensajeros de la Paz.

 Presencia en la proclamación

Ya el 19 de junio, el propio Miguel Carballeda, junto al presidente del Cermi, Luis Cayo Pérez; la presidenta de la Confederación Estatal de Personas Sordas (CNSE), Concha Díaz (a la que la reina Letizia saludó en lengua de signos); la presidenta de la Federación Española de Autismo (Fespau), Isabel Bayonas; y la medallista paralímpica, Teresa Perales, acudieron a la recepción que los nuevos reyes ofrecieron para 3.000 invitados en el Palacio Real, tras la proclamación en el Congreso de los Diputados.

En el Salón Carlos III del Palacio Real representaron así al conjunto del movimiento español de la discapacidad, acompañados por el director general de Políticas de Apoyo a la Discapacidad, del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ignacio Tremiño. En el deseo que de que el de Felipe VI sea un reinado “fecundo y fructífero”, el Cermi expresó su esperanza en que “se traduzca en un aumento del bienestar que alcance a toda la ciudadanía, incluidos los grupos sociales sometidos a mayor exclusión y vulnerabilidad”. En su comunicado expresa también su esperanza en que “la función arbitral y moderadora de los poderes del Estado y de las instituciones, que le confiere la Constitución al Rey, puede y debe estar orientada a hacer efectiva la inclusión de todas las personas y grupos ciudadanos y a ver realizados los derechos sociales, haciendo valer la definición de Estado social que constitucionalmente es España”. También confía en que “la Corona de España, encarnada en esta nueva etapa por Felipe VI, intensifique los lazos con la sociedad civil española y los movimientos sociales y sirva de estímulo permanente para que la acción de los poderes públicos siga los mandatos constitucionales de lograr que España sea una democracia avanzada en la que toda la ciudadanía pueda ejercer sus derechos en libertad y respeto, y tenga asegurado el acceso a los bienes sociales que le permitan vivir con dignidad”.