Los responsables del ámbito internacional de la ONCE, Andrés Ramos -vicepresidente del Consejo General que dirige esta área y es presidente de FOAL- y Ana Peláez, directora de Relaciones Internacionales, presentaron en junio, en San Sebastián y Sevilla, diversas facetas del Proyecto de Cooperación Internacional y Desarrollo de nuestra Organización, dentro del ciclo informativo que a este respecto se viene realizando en las principales capitales españolas.

Así, los pasados 12 y 13 de junio, la Dirección donostiarra de nuestra entidad acogió el Seminario sobre Cooperación y Desarrollo, dentro de los actos de la Semana de la ONCE en Euskadi 2014. En su primera jornada, bajo el título “En busca de manos solidarias”, intervino el propio Andrés Ramos, junto al director de Política Familiar y Desarrollo Comunitario del Gobierno Vasco, José Luis Madrazo, y el director de la ONCE en San Sebastián, Javier Domínguez. La sesión del viernes 13 se celebró bajo el título “Un nuevo paradigma socioeconómico de la cooperación internacional en España; políticas, actores, retos y oportunidades”, y contó con la participación de Ana Peláez; el presidente territorial de ONCE en Euskadi, Aitor González; el director adjunto del Foro Europeo de la Discapacidad (EDF), Javier Güemes; así como Celia Argullo, miembro del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH), y Pep Serra, docente de la Universidad de Barcelona.

En su labor de inclusión de las personas ciegas y con otros tipos de discapacidad, la ONCE avanza en este siglo XXI extendiendo a la Unión Europea, América, África y Asia su filosofía de trabajo en España. Un compromiso que, a través de la cooperación y el desarrollo, fija sus metas en las personas con discapacidad en ya más de 50 países, favoreciendo la educación, el empleo y su fortaleza dentro de la sociedad civil para mejorar sus condiciones de vida. Con carácter global, la ONCE participa así en el Comité de Naciones Unidas para el Seguimiento de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y colabora con multitud de organismos como la Unión Mundial de Ciegos (UMC).

Por regiones, en Europa se trabaja desde hace más de 15 años para que las normas comunitarias contemplen a este colectivo de 80 millones de europeos con discapacidad, consiguiendo avances en transporte adaptado, accesibilidad global e inclusión educativa y laboral, en el camino hacia una Europa libre de barreras. Además, ONCE y su Fundación contribuyen a que los fondos estructurales europeos incorporen la vertiente social y que todas las directivas de la UE contemplen la perspectiva de la discapacidad. Iniciativas -especialmente educativas y de empleo- que intentan extender a otros territorios europeos con problemáticas específicas, como la zona de los Balcanes en los que se ha aportado material educativo y formación de profesionales.

En África se ha contribuido a la escolarización de la práctica totalidad de los niños ciegos de los campamentos saharauis de Tinduf (en Argelia); única zona del mundo en vías de desarrollo que lo logra, pese a su difícil situación. Y en Marruecos, la ONCE colabora con el Instituto Cervantes para la dotación de materiales en braille y sonoro dirigidos a personas ciegas, al tiempo que se han realizado diversas donaciones de material educativo en colaboración con otros organismos. Una tarea que se extiende hasta el norte de Uganda, donde se apoya a la Fundación África Directo para mejorar las condiciones de las niñas ciegas en sus internados escolares; y a Tanzania y Senegal, donde -en colaboración con Cruz Roja Andalucía- se ha procedido a la donación de filtros solares para ciegos albinos que, en estos países, han de convivir cada día sorteando el estigma de la superchería por sus características físicas, unido a la discapacidad visual.

Pero es especialmente en Iberoamérica, a través de la Fundación ONCE para América Latina (FOAL), donde se expande esta tarea cooperativa de la ONCE. Trabaja allí en 19 países en los que viene logrando visibilizar a las personas ciegas que en no pocos casos -tras su proceso de formación y acceso al empleo- se han convertido en auténtica referencia familiar como proveedores de su único sustento. En los últimos 15 años se calcula que la ONCE ha posibilitado en esa área la educación de unos 230.000 niños ciegos que se incorporan a la escuela desde situaciones de extrema exclusión. En materia de empleo, sólo en 2012 se crearon 953 puestos de trabajo para personas ciegas; se formó a otras 23.207 personas; y 298 entidades recibieron asesoramiento para fortalecer su estatus asociativo (más de 2.000 organizaciones e instituciones de ciegos y personas con discapacidad cuentan ya con asesoramiento de la ONCE y su Fundación).

En Sevilla

Tras la cita donostiarra, el lunes 16 de junio se presentaba este ambicioso proyecto -y en concreto su proyección precisamente sobre América Latina- en la ciudad de Sevilla, donde se puso el énfasis en otro de los proyectos de cooperación ONCE, a través de FOAL, en los que cuenta con el apoyo de la Junta de Andalucía; en concreto dos programas educativos en República Dominicana para favorecer la integración de 430 alumnos en cuatro provincias (San Juan, Elías Piña, San Pedro de Macorís y El Seibo) del país caribeño. El primero de ellos pretende incrementar la matrícula de 429 niños ciegos o deficientes visuales de hasta 15 años que no acuden a diario a la escuela y formar a un docente en cada uno de los 20 municipios objeto de intervención, sensibilizando a alcaldes y líderes comunitarios. El segundo de los proyectos se centra en la mejora de la calidad educativa para estos escolares a través de asesoramiento a las familias y a los propios centros de enseñanza.

La ONCE y FOAL tramitan además otra solicitud -ésta en Paraguay- para apoyar la capacitación profesional y la inserción laboral de personas ciegas mediante intermediación y fomento de micronegocios con 200 potenciales beneficiarios.

En la presentación en Sevilla, Andrés Ramos estuvo acompañado por el vicepresidente de la Junta andaluza, y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas, en una reunión celebrada en el pabellón de la Fundación de las Tres Culturas. Complementariamente se presentaron diversas ponencias sobre esta labor internacional de la ONCE en América Latina, el compromiso de Andalucía con la FOAL y los pasos de futuro en esta política de cooperación. En ellas participaron el presidente de la Unión Latinoamericana de Ciegos (ULAC), Volmir Raimondi, junto al propio Ramos, el delegado territorial de la ONCE en Andalucía, Ceuta y Melilla, Patricio Cárceles, y el presidente del Consejo Territorial andaluz, Ventura Pazos.