La secretaria general de Fundación ONCE, Teresa Palahí, calificó de “esencial” que la robótica se fundamente en un tipo de tecnología accesible para todos, de modo que se convierta en una “herramienta fundamental” en la eliminación de barreras físicas y de la comunicación, que son aún -dijo- “muy frecuentes en nuestra sociedad”. Palahí realizó esta reivindicación en la inauguración en Madrid, el 2 de febrero, de la segunda edición de la feria internacional de robótica y tecnologías afines, Global Robot Expo.

Fundación ONCE patrocinó el evento junto a firmas como Altran, Philips Lighting, Tharsus Group Ferrovial y Accenture, comprometidas con el desarrollo de la robótica y la tecnología al servicio de la mejora de la calidad de vida, especialmente de las personas mayores o con discapacidad.

El Pabellón de Cristal de la Casa de Campo de Madrid acogió hasta el sábado 4 esta Global Robot Expo, que por segundo año consecutivo reunió a expertos mundiales de las tecnologías más punturas, con una mirada muy especial respecto a su proyección sobre aspectos como la sanidad, la educación o la integración. Una línea en la que insistió en el acto inaugural el embajador de Japón, Masahi Mizukami, que expresó el compromiso de su Gobierno con ‘la revolución robótica’ en la vida cotidiana”, con sus posibilidades asistenciales para “facilitar la vida a las personas con discapacidad y que las personas mayores sean más independientes y disfruten de una mayor calidad de vida”.

El área de robótica terapéutica y sanitaria, patrocinada en la feria por Fundación ONCE acogió con gran expectación la presentación de los exoesqueletos más flexibles y potentes del mundo, a través de demostraciones de empresas líderes en robótica asistencial y de rehabilitación. Junto a ella destacaron demostraciones como la de la Smart Home, concebida como ‘la casa del futuro’, con robots que trabajan como asistentes del hogar, muebles y elementos controlados por apps, etc. Y en la última jornada, cómo no, hubo tiempo para las exhibiciones de drones que concitaron el furor de cientos de personas, en especial los más pequeños.