El Grupo Social ONCE confirma su récord de 3.000 millones en ventas que le permiten seguir creciendo en inversión social
Subidas del 8,5% en ventas por juego y del 9,2% en la facturación de Ilunion, según el nuevo Informe de Valor Compartido 2018
El Grupo Social ONCE batió el pasado año un récord, los 3.000 millones de euros, en su recaudación por ventas de productos de juego y por facturación de las empresas agrupadas en la marca Ilunion. Se ha producido en 2018 por primera vez en su historia y ha permitido repartir premios por 1.150 millones de euros además de responder a sus compromisos, hacer frente a los salarios de sus decenas de miles de trabajadores y, sobre todo, seguir creciendo en servicios para personas ciegas y en acción solidaria, fundamentalmente dirigida a personas con discapacidad, en España y en el mundo.
La consolidación de los balances relativos al último ejercicio, que se resumen en el Informe de Valor Compartido que el Grupo Social ONCE presenta estos días por todo el país, muestra la consecución de este récord de facturación, impulsado por el crecimiento de un 8,5% en las ventas de productos de juego de la Organización y de un 9,2% en las procedentes de sus empresas Ilunion.
Todo ello conduce a afianzar un modelo socioeconómico que reinvierte íntegramente sus ingresos en inversión social para personas ciegas o con cualquier discapacidad. Datos que, en todo caso -según Antonio Mayor, director de Comunicación e Imagen de la entidad y que coordina la campaña de presentaciones- “afianzan un modelo socioeconómico de éxito (0,22 MB) con sólidos resultados y evidencian las posibilidades de las personas con discapacidad cuando disponen de un marco de oportunidad adecuado”.
En esta línea, durante 2018 el Grupo Social ONCE impulsó un puesto de trabajo para 11.937 personas (11.571 con discapacidad) y realizó, además, 1.033 contratos indefinidos a agentes vendedores de la Organización. En ese periodo fue así responsable de uno de cada 195 contratos generados en España (uno de cada 191 de los ocupados por mujeres). Así se desprende de este IVC 2018, resumen ejecutivo agregado de la ONCE, Fundación ONCE
e Ilunion
publicado ahora con los datos más destacados del ejercicio, que el Grupo Social ONCE cierra con una plantilla total de 71.393 trabajadores y trabajadoras, el 58% con discapacidad y 30.217 mujeres (42,3%). Una evolución que -afirma Mayor
(0,44 MB)- viene a confirmar la apuesta fundacional de la ONCE por la formación y la integración laboral de las personas con discapacidad.
El presidente del Grupo, Miguel Carballeda, ya había destacado por su parte que son cifras muy positivas que persiguen un fin último: crear empleo para personas con discapacidad, “conocedores de que un salario digno es la mejor manera de inclusión posible”. Y subraya que, en un arranque de siglo XXI marcado por las palabras ‘crisis’ y ‘paro’, el Grupo Social ONCE ha generado 111.327 empleos para personas con discapacidad en los últimos 18 años. “Son más de 111.000 historias de vida e inclusión real”, concluye.
Con estos datos, según el informe elaborado por la consultora PwC para la Organización, el Grupo representa ya un 0,52% del empleo total en España, es de hecho el cuarto empleador a nivel estatal y el primero en personas con discapacidad; y es responsable, por nivel de facturación, del 0,27% del Producto Interior Bruto (PIB) del país.
Grupo Social: ONCE + Fundación ONCE + Ilunion
Cada una de las áreas que componen el Grupo Social ONCE tuvo su destacada aportación a este resultado sumatorio de 2018, empezando por la matriz, la ONCE, cuyas ventas por sus diferentes productos de juego aumentaron un 8,5% hasta los 2.160,9 millones de euros, lo que ha permitido reforzar de modo directo la inversión social y el empleo, garantizando sus compromisos ligados a su condición de operador de juego responsable. Así se demuestra también con la conversión en indefinidos de un total de 1.033 contratos de vendedores a lo largo del ejercicio, todos ellos personas con discapacidad, para alcanzar una cifra total de más de 19.000 repartidos por toda nuestra geografía.
Y es que la actividad ligada a sus sorteos y loterías sigue siendo una dimensión clave de la actividad de la Organización. Un segmento en el que, como reconoce el propio director de Comunicación, "tenemos que reinventarnos constantemente (0,40 MB), dada la competitividad del mercado, especialmente en lo que respecta a nuestro cuerpo de vendedores". Y, aunque los resultados evidencian que se ha trabajado adecuamente, Antonio Mayor es consciente de que la entidad no puede ser autocomplaciente: "los retos se mantienen renovados -afirma-. Hay que seguir evolucionando
(0,36 MB), la ONCE debe estar en la vanguardia".
En cuanto al fruto de estas ventas, de cada euro ingresado por cada cupón vendido, el 53,7% se destina a premios (unos 1.160 millones al año); un 22,5% a pago de salarios de los agentes vendedores; un 13,4% a gastos de gestión del juego; y el restante 10,4% (225 millones de euros) a acción social directa para personas ciegas o con otra discapacidad. Con esta inversión, la ONCE ha dado acogida y diseñado una acción a medida para las 3.206 personas que perdieron la vista en 2018 y se acercaron a la Organización, con atención personalizada y específica; y ha seguido ofreciendo cobertura global a las más de 72.000 personas ciegas o con discapacidad visual afiliadas.
Por ejemplo, con la entrega gratuita de 130 nuevos perros guía; una completa cobertura para 7.500 estudiantes (libros y medios adaptados; profesores de apoyo; psicopedagogos; rehabilitadores...); casi 5.000 ayudas económicas específicas para personas ciegas; 90.000 horas de mediación para personas sordociegas que, al final de 2018, alcanzaban los 2.765 afiliados a la ONCE con esta discapacidad registrando un aumento del 8,7%; etc.
‘Lluvia fina' para la discapacidad
Este incremento de los ingresos por juego se traduce, literalmente, en el crecimiento del presupuesto a gestionar por Fundación ONCE, que recibe de forma directa el 3% de las ventas brutas los productos de juego, ampliando consecuentemente su capacidad inversora en acción social para la discapacidad. En concreto, este año hasta los 104,9 millones de euros (un 21% más que en el ejercicio anterior) destinados en un 80% a empleo y formación (77,2 millones) y el resto a accesibilidad e innovación (27,3 millones).
Esta inversión llega a todos los rincones del territorio mediante la colaboración con entidades y personas físicas del ámbito de la discapacidad para las que se aprobaron 1.958 proyectos de acción destinados, como fin último, a dichos colectivos y que en este caso han sido canalizados a través de 874 entidades distintas. Una lluvia fina que incide directamente en la calidad de vida y posibilidades de futuro de las personas con discapacidad.
Además, Fundación ONCE gestiona una bolsa de empleo y formación, a través de Inserta, que -con apoyo del Fondo Social Europeo (FSE)- atiende a más de 266.000 demandantes de un puesto de trabajo; mantiene 36 convenios con universidades para impulsar la educación de calidad de los estudiantes con discapacidad; gestiona anualmente 90 becas de “oportunidad al talento”; apoya a 228 jóvenes con discapacidad intelectual en proyectos universitarios bajo la fórmula de “unidiversidad”; o permite a más de un centenar de jóvenes estar cursando estudios en el extranjero.
Tareas todas ellas en las que la Organización requiere una política de abiertas alianzas, no sólo dentro sino también fuera de nuestras fronteras porque es consciente de la necesidad de internacionalizar su acción para asegurarse como proyecto de futuro. “Alianzas con nuestros iguales y también con quienes prescriben las normas que nos afectan para apoyar nuestro desarrollo en el seno de la sociedad”, advierte Mayor (0,16 MB).
Ilunion, líder en economía social
Ilunion, las empresas del Grupo Social ONCE, mantuvieron también en 2018 su tendencia alcista de los últimos seis años y mejoraron un 9,2% su cifra de negocio, hasta los 925,2 millones de euros, impulsados por el comportamiento positivo de las divisiones de Servicios, más la Hotelera y la Hospitalaria, que representan más del 80% del negocio.
El 55,4% de los 493 centros de trabajo de Ilunion, repartidos por todas las comunidades autónomas, son Centros Especiales de Empleo (CEE), una apuesta que demuestra que es posible compatibilizar la rentabilidad social y la económica, así como contribuir a fijar la población en sus territorios de origen y dar empleo allí a quienes lo tienen más difícil.
Fruto de todo este proceso, al final del año pasado, la plantilla de Ilunion superaba los 35.800 trabajadores, un 41,3% de ellos, personas con discapacidad.
Durante 2018, Ilunion destinó asimismo más de 66 millones de euros a inversión destinada a generar oportunidades de empleo para personas con discapacidad. Se materializó en iniciativas como, por ejemplo, la incorporación de un nuevo hotel en Sevilla; la adquisición de varias lavanderías industriales que le afianzan como líder de este sector; o la implantación definitiva en Colombia con dos lavanderías en Medellín y Bogotá que emplean a más de 100 personas con discapacidad, algunos de ellos, nietos de inmigrantes españoles.
El futuro pasa por la I+I+I
El Grupo Social ONCE centró el ejercicio 2018 en afianzar claves en torno al concepto I+I+I: Igualdad, Inclusión, Innovación. Para ello, cuenta con instrumentos que impulsan estas máximas, como su Observatorio de Igualdad; su decidida apuesta por la Inclusión educativa y cultural como claves de futuro y normalidad; o su modelo de Innovación transversal, que encaja con la Estrategia Europea de la Discapacidad 2010-2020 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas para 2030. Las acciones concretas impulsadas en 2018 se tradujeron en más de un centenar de convenios con organizaciones y universidades para promover la inclusión educativa de personas con discapacidad; la celebración del IV Congreso Internacional Universidad y Diversidad; su convenio con el Museo del Prado para hacer accesibles sus salas a todas las discapacidades e impulsar la experiencia ‘Hoy toca el Prado’; repartir 8.000 equipos adaptados a la última tecnología para estudio y trabajo de personas ciegas; facilitar más de 300.000 descargas de libros en la Biblioteca Digital ONCE (BDO); organizar en Madrid el Mundial de Fútbol de personas ciegas que acogió a 16 selecciones de cuatro continentes; financiar 74 proyectos de tecnología adaptada y 10 investigaciones sobre patologías que afectan a la visión...
Y todo ello, abiertos al mundo, a una esfera internacional cada vez más activa en la que se ha implicado como agente activo fundamental para culminar hitos como la puesta en marcha del Programa Iberoamericano para la Discapacidad; la ratificación y materialización del Tratado de Marraquech para el intercambio de libros entre personas ciegas de todo el mundo; acuerdos con el Banco Iberoamericano de Desarrollo (BID) o la Organización de Estados Americanos (OEA); así como la presencia en la UE para garantizar que 85 millones de europeos con discapacidad sean siempre tenidos en cuenta en todas las materias, gracias a su activa implicación en la Unión Europea de Ciegos o el Foro Europeo de la Discapacidad.
Una pata, la europea, en la que el director de Comunicación pone el énfasis en llegar a los renovados parlamentarios y gestores de la UE, “para asegurarnos de que conocen y valoran nuestro modelo (0,20 MB), así como de que puede ser un gran referente para el resto de países de la Unión”. Y otra, la radicada en Iberoamérica, en la que destaca la tarea, ya histórica
(0,40 MB), que viene desarrollando la Fundación ONCE de Solidaridad con América Latina (FOAL)
en materia de formación e impulso de las personas ciegas; pero que ha venido incorporando otras dimensiones , con iniciativas como las impulsadas por empresas del grupo Ilunion que han comenzado a desembarcar en aquel continente o la experiencia como gestor de loterías solidarias y responsables que puede aportar la ONCE a las asociaciones de personas con discapacidad de aquellos países, factores ambos de gran posible proyección de futuro.