Loida Zabala y Montse Alcoba no alcanzan, en el Mundial de Halterofilia de Kazajistán, el pasaporte para Tokio
La levantadora extremeña Loida Zabala se quedó en la antesala de su pase y clasificación para los Juegos de Tokio 2020, tras acabar en la octava plaza en su categoría de -50 kilos en el Campeonato del Mundo de Halterofilia Paralímpica, que se celebró -del 12 al 20 de julio- en Nur-Sultán (Kazajistán), con participación de 450 deportistas con discapacidad procedentes de 70 países de todo el mundo.
La cacereña levantó 95 kilos y se quedó a sólo cuatro de lograr alguna de las seis plazas directas para Tokio que se dirimían en la capital kazaja, pero aún le queda otra oportunidad, en febrero en Dubai, para mejorar su marca y garantizar su presencia paralímpica.
“Hay tiempo -señaló tras la conclusión de las pruebas- y vamos a seguir entrenando a tope, sin descanso, porque quiero devolver mi agradecimiento a la Federación y a Liberty Seguros, Universo Mujer y Marca Extremadura por traerme hasta aquí y apoyarme tanto”. Loida se muestra en tal sentido confiada, porque se siente preparada para levantar los 100 kilos, mejorando los fallos técnicos que han impedido un mejor resultado en Kazajistán. Una carencia en la que coincidía en su diagnóstico el coordinador español de halterofilia, Domingo García.
Tres nulos con polémica
Tampoco tuvo suerte en el Mundial -y por estas mismas deficiencias técnicas- la otra representante española, Montse Alcoba, que competía en -73 kilos. La catalana, que tras cinco años retirada de la competición por maternidad, regresó en 2018 con una medalla de plata en el Europeo de Francia, hizo en Nur-Sultán tres nulos consecutivos, quedándose fuera de cualquier opción de lucha por los puestos de élite que clasificaban para Tokio. “En mi primer levantamiento intenté 95 kilos y se me soltó la cincha que sujeta las piernas, me desequilibró y moví un pie, algo que se considera nulo; un accidente que puede pasar... -explica Montse-. Entonces decidimos aumentar hasta los 97 en el segundo y luego a 100 en el tercero, porque me veía fuerte, y los levanté pero los jueces percibieron algún fallo técnico... Son muy exigentes y hay que hacerlo perfecto”, lamentaba la barcelonesa. Algo que disgustó sobremanera a Domingo García, quien denunciaba que “no se puede dar tan alegremente un nulo, hay jueces que quieren aparentar dureza y... Yo mismo soy juez-árbitro internacional y estoy en contra de quienes van al fallo, que en su mayoría nunca han sido levantadores y no saben lo que es entrenar, ni la soledad y oscuridad de trabajar en un gimnasio. Montse no ha sido la única perjudicada aquí, campeonas del mundo y paralímpica, como la francesa Souhad Ghazouani o la mexicana Amalia Pérez -con cuatro oros en los Juegos-, también lo han sido”, manifestaba, dolido, a ‘dxtadaptado.com’.
La halterofilia paralímpica se disputa en la modalidad de press de banca, con el deportista tumbado. Los levantadores se agrupan en función de su peso corporal y no de su tipo o grado de discapacidad. Existen 10 categorías masculinas (desde menos de 49 hasta más de 107 kilos) y otras tantas femeninas (desde menos de 41 hasta más de 86 kilos).