La presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD), Irene Lozano, ha transmitido a las diferentes Federaciones deportivas de nuestro país el ‘plan de contingencia’ diseñado por el Gobierno para el deporte olímpico y paralímpico en caso de un nuevo confinamiento u otras medidas de restricción de la movilidad, de modo que se garanticen los mínimos necesarios para asegurar las posibilidades de nuestros deportistas de cara a los Juegos postergados al verano de 2021. La clave radicará en los Centros de Alto Rendimiento (CAR), auténticos nexos logísticos del deporte de alta competición en nuestro país, con el apoyo financiero del fútbol profesional.

Éstos se preparan ya para atajar, sin sorpresas, cualquier restricción a la movilidad que pueda derivar la evolución de la pandemia. Así, se ha previsto que los Centros de Alto Rendimiento de Madrid, Sierra Nevada (Granada) y Sant Cugat (Barcelona) puedan acoger a hasta 800 deportistas en régimen de aislamiento, al que ingresarían previa realización de un test PCR, para garantizar que no están afectados por la covid-19.

Otras medidas anunciadas por el CSD pasan, por ejemplo, por la disposición de 18,2 millones de euros (procedentes del 1% de los derechos audiovisuales de LaLiga de fútbol profesional), que se destinarán a sufragar ayudas para la cobertura de pagos a la Seguridad Social de los deportistas del alto nivel, garantizar su participación en citas internacionales y otros gastos relativos a la cobertura de sus necesidades. Además, la asignación contribuirá a completar las aportaciones de los planes ADO y ADOP, diseñados precisamente al apoyo de los deportistas olímpicos y paralímpicos, respectivamente, para su respectiva preparación de cara a los Juegos.