Y se reunirá con el consitorio de Zaragoza para la reforma de la calle Predicadores

Los habitantes de la capital manchega ya pueden pasear tranquilamente por el centro de la ciudad sin tráfico. Recientemente, Ciudad Real ha inaugurado la peatonalización de la calle Toledo desde la Diputación con la confluencia de la calle Calatrava, Feria y Caballeros. 

La alcaldesa Pilar Zamora ha visitado la zona acompañada del presidente de la Corporación, Jose Manuel Caballero, cuya obra de remodelación, en la que se han invertido 636.000 euros, ha contado con el asesoramiento de experto de la ONCE en materia de accesibilidad para que las personas ciegas no encuentren obstáculos durante su recorrido.

El proyecto ejecutado ha consistido en una peatonalización que no solo garantiza la movilidad para los viandantes, también se refuerza la sostenibilidad, ya que la alcaldesa explicó cómo desde el área de Medio Ambiente se ha actuado además embelleciendo la zona con césped y plantas autóctonas, con un sistema natural de drenaje.

Destacó la novedad de los adoquines que se han colocado en estas calles, que se han elaborado a través de materiales de desecho y que evitarán la contaminación, una peculiaridad que todavía no existe en muchas ciudades y que evitará también el denominado "efecto isla de calor", cuando lleguen las altas temperaturas.

Pilar Zamora se mostró muy satisfecha del resultado final, así como el responsable de la Corporación, gracias al cual  sectores como la hostelería y el comercio se verán muy beneficiados 

Colaboración en Zaragoza

El Ayuntamiento de Zaragoza ha presentado su propuesta para reformar la histórica calle Predicadores de la capital, y que al igual que en Ciudad Real, sigue la línea de dar prioridad a los peatones, haciendo la vía más ancha y accesible, y con menos espacio para el tráfico rodado.

El proyecto tiene que definirse aún en parte, por lo que se concretará en próximas reuniones con el tejido vecinal del Casco Histórico así como con diferentes colectivos como la ONCE, para exponer la propuestas, estudiar sus aportaciones y elaborar el proyecto definitivo. De estos encuentros se determinará el importe final de la inversión, aunque el gobierno municipal calcula que rondará los 700.000 euros.