Estás en:

Daniel Hurtado: "Los comienzos nunca son fáciles"

Daniel Hurtado en la cima del Veleta, la cumbre más alta de AndalucíaNovel vendedor del cupón de la ONCE y protagonista ciego del reto ‘8 Cimas’ por coronar las ocho montañas andaluzas más altas

Superación personal. Se queda ciego, a causa de dos infartos cerebrales, y remonta su trayectoria vital con tal ilusión que puede con todo. “La vida te pone pruebas y tienes que ir superándolas”, apunta formato MP3 audio(0,07 MB) Daniel Hurtado Piñar, de 35 años, natural de Huétor Vega (Granada).

Vídeo documental 8 Cimas formato MP4 vídeo(78,39 MB)

Paciencia y sin pausa, un pie sigue al otro. Dieciséis personas, con diferentes patologías, discapacidades y sueños personales logran el reto de culminar juntos el proyecto ‘8 Cimas’. Impresionante gesta social y deportiva convertida hoy en documental, nominado a los Premios Nacionales de Enfermería 2023. Y a Daniel, Dani para los amigos, le corresponde su parte de gloria y reconocimiento compartido. “A nivel individual no lo hubiéramos logrado nunca, pero hemos puesto todo de nuestra parte, hemos sido solidarios y nos hemos ayudado entre todos; cada uno de nosotros ha aportado su granito de arena hasta conseguir coronar las ocho cimas”, relata con entusiasmo formato MP3 audio(1,01 MB).

Y es que junto con otras 15 personas -con párkinson, fibromialgia, cáncer de colon y de mama, esclerosis múltiple, trasplantados de hígado y riñón, con trastorno bipolar ...- ha subido desde el pico Bonales, la cima más baja con 1.055 metros, hasta el Mulhacén con sus míticos 3.479 metros, el pico más alto de Andalucía, que también lo es de toda la península Ibérica, solo superado a nivel nacional por el Teide con sus 3.718 metros. “Ahora nos estamos planteando coronar el Teide, en Canarias”, adelanta como avanzadilla.

Orgulloso y feliz que anda. “Claro, cada uno ha aportado lo que ha podido y lo hemos logrado”, dice. Desde luego, no ha sido de un día para otro. “Empezamos haciendo rutas más suaves y fuimos intensificando el ritmo poco a poco”, apostilla sin acritud formato MP3 audio(0,42 MB). El veterano montañero, entrenador y coordinador del heroico grupo de intrépidos y noveles montañeros, Antonio Hermoso, ha tenido mucho que ver en formar a este gran equipo convertido ya en una familia. ‘Que la enfermedad no sea tu techo’ ha sido la premisa que les ha guiado hasta coronar, con éxito sin precedentes, las ocho cumbres andaluzas.

Quién se lo iba a decir a Dani cinco años atrás. Son recuerdos del pasado, ya no mueven molino, pero dejaron su huella. Aquel segundo infarto cerebral, medicalizado en el centro hospitalario tras el primer embiste, le robó la vista por verse dañado el nervio óptico. En el caso de la pérdida de movilidad, a fuerza de constancia y rehabilitación ha ido subiendo escalones y se puede decir que es una secuela prácticamente superada; y también recuperada la masa muscular.

De un minuto para otro, la realidad cambia. Notable a veces, desapercibida en ocasiones. De aquel fatídico día -“el cinco de enero de 2018”, apunta la fecha- no recuerda apenas nada. De casa al hospital y largos meses de recuperación. “Estoy vivo gracias a Dios porque los médicos ninguno contaba conmigo. Me mandaron a San Rafael (hospital en Granada) para que me muriera. Y mira, aquí estoy formato MP3 audio(0,30 MB) gracias a Dios”, insiste y afirma que “no rindiéndose y luchando se sale de todo. Es duro, sí, pero se sale”. El reto de vivir lo había conseguido.

Nuevos encuentros, experiencias y conocimientos abrían sus puertas de par en par. La afiliación a la ONCE no se hacía esperar y como bien nacido es agradecido. “La verdad es que me han ayudado muchísimo y lo siguen haciendo día a día”, reconoce al filo de la emoción. “Los psicólogos y los TR (técnicos de rehabilitación) me han dado una autonomía que sin ellos no hubiera logrado; me han enseñado a manejarme con mi bastón blanco en la calle, cómo subir a un autobús (...) Y sin los tiflos (especialistas en accesibilidad informática y telefonía) no me hubiera adaptado para utilizar el móvil”, comenta con detalle formato MP3 audio(0,72 MB).

Daniel Hurtado es agente vendedor de los productos de juego responsable de la ONCESer centinela de la ilusión de la ONCE le ha devuelto la estabilidad laboral. Aprende rápido, con responsabilidad en su punto de venta, y poco a poco se hace con una clientela fija. “Todos los días aprendo algo nuevo”, asegura este joven, en la venta de cupones desde mediados de abril de este mismo año 2023. Labor que desempeña en Huétor Vega, su pueblo natal. “Me apasiona mi trabajo porque estamos repartiendo ilusiones entre la gente, ayudamos a que salgan de la monotonía diaria”, declara dicharachero formato MP3 audio(0,39 MB) mientras asegura: “hasta la hora del sorteo avivan su imaginación y la esperanza de tener otra vida, no mejor porque tener dinero no quiere decir que sea una vida mejor pero sí distinta”.

Sonríe a las circunstancias, sin paliativos. Gusta disfrutar de buena compañía y de los deportes de acción “al aire libre”. Tiene por costumbre dejar preocupaciones y problemas colgados de las ramas de un árbol, que tiene cerca de la puerta de su casa, cuando sale a caminar. A su vuelta comprueba que “no hay ni un diez por ciento de lo que recordaba haber dejado; los problemas muchas veces están en nuestra mente y nos castiga, nos castiga, nos castiga -insiste en tan original argumentación formato MP3 audio(0,81 MB)- y es la que nos atrapa”.

Daniel Hurtado durante la ruta del reto 8 Cimas con dos compañeros que le ayudan usando la barra direccionalLa caza mayor (de jabalí, ciervo, etc.) era una de sus prácticas de antaño. En los parajes campestres se movía como pez en el agua. “Era cazador y estaba día y noche en el campo, desde siempre me ha gustado y también los animales. Tenía cabras, caballos, vacas, gallinas... de todo un poco. Era mi pasión y sigue siéndolo...”, reconoce con cierto halo de nostalgia. Mientras, Luna, una perrita que iban a sacrificar y él la adoptó, lleva un rato que no para de ladrar reclamando su atención. “Le dimos una segunda oportunidad y le tocó la lotería, la verdad, porque vive más a gusto que Dios”, bromea mientras brilla, de nuevo, su voz al otro lado del hilo telefónico.

Adaptarse o morir, reza el dicho. Dani lo ha conseguido, también en las montañas que ya no ve pero tanto ama. Con el uso de una barra direccional de titanio, el manejo de pértigas y apoyo logístico, a cargo de la ONCE de Granada, logra el reto ‘8 Cimas’ o coronar la cima más alta de cada una de las ocho provincias andaluzas. “Al principio nos costaba mucho trabajo, luego íbamos más sueltos en los ascensos. Todos los comienzos nunca son fáciles”, concluye. formato MP3 audio(0,68 MB)

Genoveva Benito