El 25 de septiembre de 2015, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que incluye 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, conocidos por sus siglas ODS. Fijó, entonces, una hoja de ruta universal, con incidencia en todos los países del mundo, para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y asegurar que todas las personas gocen de paz y prosperidad cuando lleguemos al citado 2030. Nadie en su sano juicio se negaría a sumarse a esta intención, que tiene el loable objetivo de dejar un mundo mejor para nuestros hijos e hijas, para generaciones presentes y futuras. Otra cuestión es desde cuándo y cómo se realiza esa contribución a los ODS, para evitar caer en modas o incluso cumplimientos obligados, que casi nunca dan buenos resultados. El Grupo Social ONCE acumula 85 años de trabajo que encajan más que perfectamente en al menos 10 de los 17 Objetivos. 

Contribuir al desarrollo de las sociedades y de todos los ciudadanos por igual está en nuestro ADN. Nacimos con ello y en ello continuaremos, alineados siempre con quienes crean que es posible.

Las tres áreas de acción del Grupo Social ONCE trabajan históricamente desde la perspectiva del desarrollo sostenible, en una amplia concepción de este término, volcado en los denominados criterios ASG (Ambientales, Sociales y de Buen Gobierno) en toda nuestra cadena de valor. Porque todo lo que hacemos tiene ese marchamo de búsqueda de una realidad que incluya a las personas -a todas las personas- y, para ello, somos ambiciosos históricamente para situar a quienes tienen alguna discapacidad o están en riesgo de inclusión en primera fila de derechos, que es como decir en primera fila de ciudadanía y de futuro. 

Y lo hacemos desde mil ámbitos: educación, accesibilidad, formación continua, empleo, igualdad, respecto, género… En todo ello fijamos con rotundidad la “S” de sostenibilidad, sin olvidar, sino todo lo contrario, que la “D” de discapacidad debe contar con una presencia transversal en el desarrollo al que aspiramos. El número de iniciativas que acumulamos en este sentido en el Grupo Social ONCE son tan importantes como elevadas en número, cada una en un área de trabajo: empoderamiento de las personas con discapacidad, con especial incidencia en mujeres y niñas; generación de empleo para casi 70.000 trabajadores y trabajadoras, de las que un 62% tienen discapacidad, lo que nos convierte en el mayor empleador mundial de estas personas; esfuerzo innovador e inversor en sectores de reciclaje y economía circular; inversión elevada en I+D+i volcada en la usabilidad y la no exclusión de ningún usuario de las nuevas tecnologías; autonomía personal a través de rehabilitación, tecnología adaptada, servicios sociales de todo tipo… 

Y todo ello, de la mano de mucha gente y con la colaboración de mucha gente. Primero, con la propia ciudadanía, a quien hacemos partícipes cada día de nuestra realidad puesto que son el motor de la misma, confiando en nosotros; y, luego, codo a codo con muchos aliados que son ya amigos, como el movimiento asociativo de la discapacidad, el tercer sector o la economía social, conformado una red de colaboración que encaja también a la perfección con otro de los ODS, quizás uno de los más importantes, porque nos demuestra que solos no vamos a ningún lado: ODS número 17, impulsar alianzas para lograr los objetivos. Así lo hemos hecho durante casi 85 años de historia. Elegimos estar al lado de los ciudadanos y así lo seguiremos haciendo hasta 2030 y más allá, con total seguridad.