Tras 40 años de historia, dos mujeres estarán al frente de la Unión Europea de Ciegos durante los próximos cuatro años
Organizada por la Organización de Ciegos y Ambíoples de Portugal (ACAPO
), la Unión Europea de Ciegos (EBU
) celebró del 11 al 14 de febrero en Lisboa su 12ª Asamblea General, que sirvió para cerrar un ciclo histórico, ya que este año cumple 40 años de existencia, y abrir otro en el que por primera vez dos jóvenes mujeres estarán al frente de la institución para el próximo mandato.
Se trata de la filandesa Tytti Matsinen y la española Bárbara Martín, que ocuparán la presidencia y la vicepresidencia primera, respectivamente, de su Junta Directiva, que se ha visto renovada en 11 de sus 15 miembros.
“Para mí, las principales tareas durante este próximo mandato son tanto internas como externas. Internamente, necesitamos crear estructuras y prácticas que sean inclusivas y permitan y faciliten la participación igualitaria de todas las organizaciones miembros de la EBU, independientemente de sus recursos financieros. Necesitamos ser más transparentes y más comunicativos y facilitar el compromiso de los miembros no sólo con la EBU sino también entre sí. Esto es algo que ha sucedido antes, pero a medida que las generaciones cambian y llegan nuevas personas debemos apoyar a los miembros para que se conecten entre sí, especialmente porque la pandemia causó daños en este sentido”, manifiesta Matsinen a nuestra revista.
Y a nivel externo, reconocía que “es necesaria una promoción activa a nivel nacional, europeo y global. Necesitamos encontrar formas para que más personas ciegas y con discapacidad visual defiendan nuestros derechos en procesos estratégicamente relevantes. Por esta razón estoy muy comprometida a aumentar la presencia de la Unión Europea de Ciegos en Bruselas”.
Para Bárbara Martín, que pasa de la segunda a la primera vicepresidencia, también es un honor y un reto enorme, para el que trabajará por seguir modernizando tanto la estructura como la gestión de la EBU. "Para mi es un orgullo, y estoy muy agradecida a la ONCE por el apoyo de mi candidatura", manifestaba a Así Somos, y afirmaba (1,83 MB) que "con la elección de la nueva presidenta se ha roto una barrera muy importante".
Representantes de las 42 organizaciones de personas ciegas miembros de la EBU eligieron así la composición de su Junta Directiva, dando cabida a 11 nuevos miembros de sus 15 componentes, en la que el irlandés Kevin Kelly ocupará la Vicepresidencia Segunda, el suizo Roland Studer ocupará la Tesorería y la sueca María Thorstensson ocupará la Secretaría General.
Con la presencia in situ de 32 de sus organizaciones miembro, la de Lisboa ha sido la Asamblea con mayor participación de la historia de la EBU. En esta ocasión la delegación española, representada por la ONCE, estuvo encabezada por el vicepresidente del Grupo Social ONCE, Alberto Durán, y conformada por el responsable de relaciones institucionales y vicepresidente de la Unión Mundial de Ciegos, Fernando Riaño, y la responsable de la Oficina de Asuntos Europeos, Cristina Barreto. Por otro lado, les acompañó el director de Relaciones Internacionales del Grupo Social ONCE, Javier Güemes, en calidad de observador y presidente del comité de escrutinio.
"Tanto la elección de Barbara Martín que, dada su dilatada experiencia, va a ser un apoyo muy importante para la nueva presidenta, como la renovación de la directiva en general de la EBU es una muy buena noticia que recibimos con alegría en el Grupo Social ONCE, porque ello ayudará a seguir afrontando retos importantes como será tener una mayor presencia en Bruselas y en las políticas que afectan a las personas ciegas y con discapacidad visual de Europa", manifestaba Alberto Durán a Así Somos
(0,74 MB).
Balance de mandato
Bajo el título “Compromiso, equilibrio, unidad. Reflexionando sobre 40 años, imaginando el futuro” , el presidente saliente de la EBU, Wolfgang Angerman, junto a Bárbara Martín presentaron ante la asamblea el informe correspondiente al anterior mandato; un informe cuatrienal que ofreció una visión general de las actividades de los órganos constitucionales y otros elementos de la Unión Europea de Ciegos desde octubre de 2019 que sirvió para dar una impresión de la variedad de áreas de trabajo y proyectos, así como la intensa colaboración mutua entre la Unión y sus miembros nacionales, y los resultados alcanzados a través de este trabajo.
La llegada de la pandemia del COVID-19, la guerra en Ucrania, el fallecimiento de tres importantes miembros de la Directiva, entre ellos el propio presidente, el italiano Rodolfo Cattani, en septiembre de 2022, además de la profesionalización de la oficina central en París, que se trasladará a Bruselas en 2026, entre otros acontecimientos, han sido circunstancias históricas que han marcado la manera de trabajar de la EBU, y que en palabras de Bárbara Martín han coadyuvado a renovar y revolucionar los procesos de trabajo de la institución. "Han sido cuatro años muy complicados en el que hemos realizado un trabajo ímprobo que a pesar de todo nunca ha parado la acción de la EBU", afirma. (1,12 MB)
Prioridades de futuro
Pese a las circunstancias, o precisamente por ellas, la vicepresidenta española elogia (1,60 MB) la fidelidad de las organizaciones miembro de la EBU durante el pasado mandato, dado que en muchos casos no sólo han mantenido las cuotas de financiación que suponen un importante porcentaje de su sostenibilidad, sino que se han visto incrementadas.
Otro de los puntos más relevantes de la Asamblea fue la presentación y aprobación del Plan Estratégico de la EBU 2024-2028, que recogió las aportaciones de las organizaciones miembro y se centró en cuatro prioridades, con sus objetivos, a trabajar para su cumplimiento.
La primera de ellas es concienciar e influenciar en el ámbito político, tanto a nivel europeo como en cada país, dirigiéndose a los responsables políticos y de la sociedad en general sobre los derechos y las necesidades de las personas ciegas y deficientes visuales; la segunda, empoderar a las personas ciegas y deficientes visuales para que puedan participar plenamente en todos los aspectos de la vida, a través de la educación y el empleo, la accesibilidad y la libre circulación; la tercera, reforzar la capacidad de las organizaciones de personas ciegas y deficientes visuales en toda Europa, apoyando la cooperación entre los miembros y potenciando sus capacidades entre otras acciones, y la cuarta prioridad es fortalecer la EBU como un paraguas de organizaciones de personas ciegas y deficientes visuales para mejorar el impacto y la sostenibilidad.
La sostenibilidad de la Unión Europea de Ciegos pasa fundamentalmente por la captación de fondos que garanticen el buen y mejor funcionamiento de la entidad paraguas, cuyo 60% de los fondos proceden de la Unión Europea, y resto procede de las cuotas que aportan los propios miembros y de la captación de otros fondos procedentes de entidades externas, según explica Bárbara Martín. (0,99 MB)
El marco de la Asamblea dio además la posibilidad de que todos los miembros participaran y debatieran sobre cuestiones relacionadas con mujer e igualdad, inteligencia artificial, o repasaran los 40 años de trayectoria de la EBU, a través de mesas redondas y ponencias que dieron paso a preguntas y debates, por lo que, como apostilla Bárbara Martín, la 12 Asamblea General de Lisboa ha supuesto un punto de inflexión muy importante en la vida de la EBU.
"Han sido 40 años de mucho trabajo que se ha reflejado en indudables avances para todas las personas ciegas y con discapacidad visual del continente pero aún quedan muchas cosas por hacer, y hay que hacerlas mejor", apostilla la vicepresidenta. (1,02 MB)
Mercedes Leal