El 85 Aniversario de la ONCE, un recorrido por la historia de nuestros productos
El 13 de diciembre de 2023 se cumplieron 85 años de la creación de la ONCE, una Organización nacida en 1938 fruto del coraje de un grupo de ciegos que se plantearon vivir de su trabajo. Desde entonces, y gracias a la venta de lotería, ha ido impulsando la autonomía personal y la inclusión social de las personas con deficiencia visual grave y con otras discapacidades. Con motivo de este aniversario haremos un recorrido por la historia de nuestros productos, comenzando por las rifas locales, semilla del actual Cupón Diario, hasta hoy en día.
De las rifas de los ciegos a la creación de la Organización Nacional de Ciegos
A principios del siglo XX los ciegos españoles se ganaban casi exclusivamente la vida mendigando. Era la época de la expansión del comercio en las ciudades, donde las rifas encontraron su lugar. Los ciegos comenzaban a formar parte del día a día de las urbes y a beneficiarse de forma cada vez más asidua de este tipo de rifas.
Sin embargo, estas ventas eran ilegales desde el 31 de diciembre de 1887, cuando el Gobierno dejó de conceder licencias oficiales a los centros de beneficencia para explotar loterías particulares y que eran su principal fuente de ingresos. Aun así, el juego siguió siendo utilizado por ayuntamientos y diputaciones provinciales para hacer frente a los gastos de beneficencia.
Levante fue la región que más iniciativas llevó a cabo para mejorar la vida de los ciegos. Fue en Alicante, el 17 de enero de 1903, durante la celebración de la rifa de un cerdo por la festividad de San Antón, cuando los dos mendigos ciegos que portaban el animal para estimular la compra de las rifas vieron en esta práctica una forma de lograr beneficio para las personas ciegas sin trabajo.
Decidieron hacer que esta práctica fuese diaria, de lunes a sábado. Así nace la sociedad “La Caridad”, que tenía como propósito asistir a los ciegos indigentes con las ganancias del juego. Pronto comenzó a conocerse como “La rifa de los ciegos alicantinos”. Por 10 céntimos el cupón, se vendían mil cupones diarios.
Todos los ciegos vendedores se comprometían a expedir una serie de 100 números. Del precio, 6 céntimos se destinaban al premio, 1 céntimo a “La Caridad” y 3 al vendedor. En un bombo se introducían las bolas con los números del 1 al 100 y se extraía el número ganador.
También lanzaron extraordinarios con dos números de la misma terminación en cada cupón. Se vendían a 20 céntimos, por lo que el vendedor cobraba más. La aceptación fue tan grande que pronto comenzó a imitarse en otras ciudades, y comenzó a conocerse el cupón como “Los Iguales”. A partir de ahí se popularizó la venta del cupón por todo Levante y Almería, extendiéndose a otros puntos de España.
Fue en 1935, durante la visita del presidente del Gobierno a Sevilla, cuando el presidente de la “Sociedad Hispalense”, Javier Gutiérrez de Tovar, le convence de la necesidad de legalizar la venta de su cupón con una fórmula que permite que los ciegos cuenten con unos ingresos dignos. Un mes después se autorizó en Sevilla.
El presidente de la Hispalense comienza a cobrar protagonismo en el desarrollo de las organizaciones de ciegos que empezaron a proliferar en todo el país, aunque seguían sin contar con la legalización nacional. Así que en 1935 deciden reunirse en Madrid para presionar al Gobierno. A cambio de la autorización de la venta del cupón, las organizaciones se comprometen en crear empleo para las personas ciegas y abrir Talleres y Casas de Trabajo para quienes quieran aprender un oficio.
Con la aprobación provisional de la venta del Cupón en 1935, las asociaciones de ciegos pusieron su esfuerzo en la unificación del cupón en toda España, autorizado y protegido por el Estado, y en crear un organismo nacional que velase por sus intereses, algo que se hizo realidad el 13 de diciembre de 1938 con el nacimiento de la Organización Nacional de Ciegos.
Ampliar información en el libro “Aniversarios de Ilusión” , que se puede descargar desde Publicaciones de PortalONCE.