Ciudadanos de Madrid y familias educadoras de perros guía exigen medidas para que los paseos sean más seguros en el madrileño Parque de El Retiro
Tras el trágico atropello que mató a Wisper, un futuro perro guía de 16 meses
El parque del Retiro acogió el pasado 19 de octubre una simulación masiva de atropello como respuesta al trágico accidente que supuso la muerte de Wisper, un futuro perro guía de la ONCE, que fue arrollado por un camión de reparto el 6 de septiembre. A la cita, impulsada por la asociación ‘Paseos Seguros’, acudieron numerosas familias de futuros perros guía y otros ciudadanos que han apoyado la causa cuyo objetivo es exigir mayor seguridad dentro del Parque.
María Gironza, dueña Wisper, recuerda con mucha tristeza el incidente y nos cuenta que, a pesar de sus intentos por advertir al conductor, éste no evitó el trágico desenlace. Por ello, el propósito ahora es el de reclamar medidas de seguridad en el parque para prevenir futuros accidentes similares.
“Las leyes cambian cuando muere un niño a consecuencia de un árbol, entonces se cierra el parque, pero es que esto que ha pasado le podía haber pasado a un niño, ya que Wisper no era un chihuahua, era un perro de 38 kilos y el conductor ni lo vio. No podemos esperar a que este accidente se repita con un niño para que se tomen medidas, porque lo de Wisper ha sido muy grave. No sólo era mi perro, era un futuro perro guía y por tanto un perro muy valioso" critica María (1,40 MB), quien nos anuncia que ya le ha escrito una carta al alcalde, ha contactado con policías y bomberos municipales para comunicarles el tremendo suceso y, a la vez, quiere conocer la estadísticas de siniestros ocurridas en el parque por motivos similares.
La iniciativa “Paseos seguros” surge en respuesta a la coincidencia entre el horario de paseo sin correa de perros y el de circulación de camiones de reparto en El Retiro. Aunque la normativa establece una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora, ésta se incumple frecuentemente, explica Gironza, quien reclama (1,97 MB) ampliar el horario de restricciones de acceso para vehículos partiendo de una revisión de la ley que lo regula, y que se instalen mecanismos de control de la velocidad de los mismos, entre otras medidas.
Asú, durante todos los viernes un grupo de personas representa atropellos individuales para concienciar sobre la situación, pero el sábado 19 la convocatoria fue más numerosa, con la participación de educadores, amigos, y vecinos de la zona, movidos por la urgencia de evitar futuros accidentes.