La política de la ONCE se rige por la tolerancia cero hacia el fraude, la corrupción y otro tipo de ilícitos, fomentando en su seno una cultura corporativa ética, responsable y sostenible. Bajo ningún concepto se toleran en nuestro entorno acciones u omisiones que puedan ser constitutivas de incumplimientos legales o contrarias al Código Ético de Conducta, con independencia de quién sea la persona que las cometa y del cargo que ocupe.  En este sentido, la ONCE cuenta desde hace años con Sistemas de Gestión de Compliance Penal y Tributario para asegurar que toda la Organización (incluyendo equipos directivos, plantilla y terceras partes vinculadas) cumple con el marco normativo aplicable y con ciertos parámetros de tipo ético. 

En esta línea, la ONCE acaba de actualizar y reforzar sus Políticas de Compliance Penal y Tributario, y el Catálogo de conductas prohibidas y parámetros de comportamientos esperados, a raíz de las últimas modificaciones introducidas en el Código Penal, por las que se amplía el catálogo de delitos que pueden generar la responsabilidad penal las personas jurídicas, y de la necesidad de actualizar y reforzar otros puntos de ambas políticas.  Estos documentos son de obligado conocimiento por parte de todos los empleados y empleadas de la ONCE por lo que, dada su relevancia, se incluyen en el Plan de Acogida para que sean conocidos y cumplidos desde el momento mismo de la incorporación en la ONCE. Están publicados tanto en la página web como en PortalONCE.

Por otro lado, también estamos renovando el diseño y operativa del actual Canal de Denuncias de la ONCE a través del cual, miembros de la plantilla, afiliados/as a la ONCE, voluntarios/as, clientes, proveedores y, en general, cualquier tercero pueden comunicar acciones u omisiones llevados a cabo en el seno de la ONCE o de sus entidades vinculadas (FOPG, FOAL, FOAPS, FEDC, FADEC, FCECS, TGS y FOBV) que pudieran ser constitutivas de delitos, infracciones administrativas, incumplimientos del Derecho de la UE u otros incumplimientos legales, incluidas las infracciones de naturaleza tributaria.  El canal se mejorará con una herramienta que logra un doble objetivo: reforzar el carácter anónimo y confidencial del canal, permitiendo enviar denuncias de manera ágil y sencilla y la interacción con la persona informante, incluso aunque no se haya identificado; y optimizar la gestión de las comunicaciones recibidas, para hacerla más segura, eficiente y trazable.