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ICEVI-Latinoamérica se pone de largo en Madrid

Su Junta Directiva prepara en España, con el auspicio de la ONCE, su Plan de Acción para los próximos cuatro años

Niñas ciegas en la escuelaEn pleno cierre de su proceso de legalización, tras la celebración de su Asamblea constituyente el pasado abril en Montevideo (Uruguay), el Consejo Internacional para la Educación de Personas con Discapacidad Visual de la región latinoamericana (ICEVI-Latinoamérica) celebró en Madrid, el 8 y 9 de noviembre, reunión de su Junta Directiva que ha puesto en marcha un Plan de Acción cuatrienal para desarrollar su estructura de funcionamiento y avanzar en el vasto proyecto de inclusión educativa de los niños y niñas ciegos de aquella región.

Bajo el auspicio de la ONCE, a través su Fundación ONCE para América Latina (FOAL), representada por su directora Mª Jesús Varela, los miembros de la Junta, presidida por la argentina Cristina Sanz, y los coordinadores subregionales de México, Región Andina, Brasil, Centroamérica y Caribe y Cono Sur -Cristal Vargas, Rosario Galarza, Marta Ribeiro, Julio Canizález y Norfa Frez, respectivamente-, trabajan ya con el objetivo de que ICEVI-Latinoamérica se conozca más y mejor en los 19 países miembros.  “Hay que arrancar el proceso de elección de representantes de cada país, para que a su vez ellos designen representantes subregionales, que serán los que conformarán una Junta Directiva que se renovará por elección asamblearia cada cuatro años”, explica Cristina Sanz. Para ella, es fundamental que el Consejo adquiera una mayor y mejor presencia en ámbitos gubernamentales y docentes que impulsen el objetivo de la campaña mundial EFA-VI: la inclusión educativa de todos los niños y niñas con discapacidad visual del mundo.

“Menos del 10% de ellos llegan a la escuela -explica Sanz-. En el caso de Latinoamérica, dada su extensión, las realidades son bastante dispares entre países. Para empezar no hay censos poblacionales. Se trata, pues, de un complejísimo trabajo ya que no se conoce la realidad objetiva de esta población”. Por eso, la representante argentina estima clave la cooperación con ICEVI 
 de un amplio abanico de profesionales que trabajan ya en el ámbito de la discapacidad visual.

De norte a sur

Alumna ciega de una escuela salvadoreñaEsa inexistencia de censos o estadísticas que cuantifiquen el número real de personas con discapacidad; la situación de pobreza extrema que viven muchas de ellas en países como Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala, Ecuador, Perú o Bolivia; y el consecuente abandono que sufren los niños y niñas ciegos de estos países por parte de sus propias familias, unido a las dificultades de acceso a los recursos educativos de la población de zonas rurales y la escasa capacitación de docentes especializados en su atención educativa derivan, para el Consejo latinoamericano, en un difícil diagnóstico del escenario de trabajo y de las carencias particulares de cada país miembro.

En el caso de México, el principal escollo es la ausencia de docentes y profesionales, junto con el escaso apoyo de las familias, según Cristal Vargas.

Por su parte, para Rosario Galarza, coordinadora de la Región Andina (que representa a Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Venezuela), la realidad es más que compleja, porque, “aunque básicamente en todos estos países existen leyes sobre discapacidad y educación inclusiva, los propios profesionales y docentes desconocen el enfoque y principios que están detrás de ese modelo educativo”, nos explica la representante peruana

Por su lado, en la zona que representa el salvadoreño Julio Canizález (Centroamérica y Caribe) la disparidad de acceso a los recursos específicos y de carácter cultural entre las zonas urbanas y rurales aporta, después de un decenio de trabajo en este ámbito, un grado enorme de complejidad para lograr una transformación real. “Es tanta la diferencia en los condicionamientos de los gobernantes y de las municipalidades, que se restringen y limitan muchísimo aspectos que serían básicos para atender a estos niños y niñas, como es la formación de profesionales o la adaptación de materiales educativos”, señaló a nuestra revista.  Entre los aspectos más positivos, que pueden mover a un cierto optimismo, la representante del Cono Sur -Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay-, Norfa Frez, hizo referencia a la aplicación de la Convención de la ONU sobre Derechos de las Personas con Discapacidad que "está aportando en estos países unos parámetros muy claros para que los gobiernos incluyan políticas nuevas sobre educación inclusiva"afirmó.

Identidad y objetivos

El Consejo Internacional para la Educación de Personas con Discapacidad Visual (ICEVI) es una asociación global de individuos y organizaciones que promueven el acceso igualitario y una educación apropiada para todos los niños y jóvenes con discapacidad visual para que puedan desarrollar plenamente sus potencialidades. En la actualidad, sólo un 10% de niños y niñas con discapacidad visual del mundo tienen acceso a la educación. Por eso, ICEVI, como organización profesional no gubernamental, abre sus puertas a cualquier grupo o persona que desee apoyar sus objetivos. Fundado en 1952, ha ido avanzando en la formalización de su estructura y tareas. Desde 2002 mantiene reuniones a modo de Asamblea General cada cuatro años, y cuenta con el reconocimiento del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas, UNICEF y UNESCO y trabaja activamente con la Unión Mundial de Ciegos (UMC), la OMS y el Banco Mundial.

La Campaña Global EFA-VI (Educación para Todos los Niños con Discapacidad Visual) es el objetivo primordial de ICEVI. Con él, desarrolla programas y proyectos dirigidos a capacitar a docentes en la atención educativa de niños y niñas con discapacidad visual, a atender su habilitación y rehabilitación, y a convertirse en un interlocutor de peso en foros nacionales e internacionales que ayuden a cambiar la realidad del 90% de los niños y niñas con discapacidad visual del mundo, no escolarizados.