Pocos momentos como el presente evidencian la realidad de que la economía es fundamental, pero... no lo es todo. La ONCE, junto a su Fundación de solidaridad con el conjunto de las personas con discapacidad y su grupo de empresas sociales ILUNION, viene sufriendo con toda crueldad los efectos de una crisis que se prolonga ya a lo largo de ocho ejercicios y que ha dejado en la cuneta a miles de empresas, instituciones y organismos de todo tipo. Nuestra entidad no ha sido ajena a ese azote económico que se trasladó de los mercados financieros a la maquinaria productiva y, de ésta, a la vida cotidiana de los ciudadanos; en nuestro país con una singular repercusión en materia de pérdida de empleos y de poder adquisitivo del conjunto de la población asalariada.

Arropada, no obstante, por la solidaridad de una ciudadanía que nunca ha dejado de mostrarle su confianza y su respaldo, la ONCE ha sabido y podido mantener su tarea y su compromiso, pese a sufrir importantes recortes en las ventas de sus productos, asediados además por la confluencia de unas prácticas de juego ilegal que no acaban de ser erradicadas y por la expansión sin precedentes de las apuestas online, que amenazan con desestabilizar al conjunto del sector.

A las dificultades derivadas de este derrotero se unió en los últimos ejercicios el estrangulamiento de la financiación oficial (vía presupuestos europeos, estatales, autonómicos y locales) a los programas sociales en los que la ONCE viene históricamente implicada con las distintas Administraciones como fundamentales compañeros de viaje.

Pues bien, pese a todo ello, ONCE y su Fundación han continuado creando empleo (en 2014 superaron los 10.000 puestos de trabajo, fundamentalmente para personas con discapacidad) y dando la cara en la defensa de unas políticas sociales proactivas que afrontasen la crisis como un reto y las dificultades como una oportunidad para desarrollar nuevos talentos. La recompensa no ha podido ser más fructífera: el recién publicado estudio Merco sobre responsabilidad de las empresas y buen gobierno corporativo nos sitúa en el primer lugar del ranking nacional de acuerdo con el criterio de más de 2.000 altos directivos y expertos y 2.500 consumidores. No hay reconocimiento que pudiera llenarnos de mayor orgullo.