El jefe del departamento de Tecnología Accesible e I+D de Fundación ONCE, David Zanoletty, defendió el pasado 21 de abril un nuevo paradigma de estrategia urbana que considere la ciudad del futuro como un sistema complejo y dinámico cuyo objetivo más importante sea el bienestar de todos sus ciudadanos. Lo hizo -en la ciudad de la Alhambra- en el contexto de la Convención de la Edificación Contart 2016, promovida por el Consejo General de la Arquitectura Técnica y organizada por el Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Granada, en la que Fundación ONCE e ILUNION compartieron además un stand informativo.

Este modelo de la “Smart Human City”, como ciudad inteligente e inclusiva, incluye los conceptos de igualdad y flexibilidad en el acceso y utilización de los servicios ciudadanos, prestados tanto a través de sistemas tradicionales como de las nuevas tecnologías de la información (TIC); lo que exige -recalcó Zanoletty- una exigencia de accesibilidad “transversal” en toda la actividad ciudadana. Una condición que, en sus propias palabras, “deben cumplir los entornos, procesos, bienes, productos y servicios, así como los objetos o instrumentos, herramientas y dispositivos, para ser comprensibles, utilizables y practicables por todas las personas en condiciones de seguridad y comodidad y de la forma más autónoma y natural posible”.

El grupo de empresas de ONCE y su Fundación, ILUNION, estuvo también presente en Granada con un estand que mostró herramientas ya disponibles, como las Beepcons (antes Viacons), aplicación móvil que -previa ubicación de unas balizas inteligentes en los correspondientes espacios- permite localizar objetos o lugares de ese entorno a las personas con discapacidad visual; además de otras como los bucles magnéticos para personas sordas, los últimos avances en señalética, etc.

Aplicado al sector turístico, en un hotel por ejemplo, las Beepcons permiten al usuario localizar el ascensor, orientarse hacia él, leer autónomamente la carta del restaurante, ubicar puertas, etc.

Fundación ONCE distribuyó además en el Congreso el Observatorio de la Vivienda 2013, una investigación que elaboró junto a ILUNION y al CERMI que revela la falta de formación de los profesionales implicados respecto al diseño para todos y el incumplimiento generalizado de los requisitos y normativa vinculados a la accesibilidad universal de las viviendas en España.