Las mujeres con discapacidad que habitan en el ámbito rural en nuestro país padecen una situación especialmente grave en lo que respecta a su integración laboral y social, a la que Fundación ONCE y su sociedad Inserta Empleo han querido hacer frente, de la mano de la Confederación de Asociaciones de Familias y Mujeres del Medio Rural (Afammer), según nos explicaba, tras proceder a la rúbrica de un importante acuerdo en esta materia, la directora general de Inserta, Virginia Carcedo (0,50 MB).

El convenio, que la presidenta de la Afammer, María del Carmen Quintanilla, signó el 2 de febrero en Madrid con la propia Carcedo y con el vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, Alberto Durán, tiene como objetivo central fomentar el empleo de las mujeres con  discapacidad en el medio rural. Un reto clave dada la especial situación que afecta al más de un millón de españoles con discapacidad que habitan en el ámbito rural y más de la mitad de los cuales son mujeres, que sufren una triple discriminación, en palabras de María del Carmen Quintanilla (0,07 MB).

Una especial discriminación que, como explicaba la secretaria general de Fundación ONCE, Teresa Palahí, también presente en el acto, se materializa en una general falta de información, lejanía de los centros de decisión (habitualmente urbanos) y carencias en materia de servicios y de atención social (0,23 MB). Aspectos todos ellos en los que estima que Fundación ONCE y su sociedad instrumental para el empleo, Inserta, pueden jugar un gran papel, pues un 50% de este  colectivo carece de empleo, como denunciaba también la presidenta de Affamer (0,24 MB).

Y para llevarlo a la práctica, las entidades firmantes se han comprometido a realizar una labor de coordinación y apoyo mutuo en todas las acciones que favorezcan la inclusión laboral directa e indirecta de estas mujeres. Incluidas acciones formativas y prácticas profesionales para mujeres y familiares con discapacidad del ámbito rural, no sólo desde una dimensión digital sino también a través de las propias oficinas físicas tanto de Affamer como de Inserta Empleo, según puso de relieve Virginia Carcedo (0,30 MB).

Un reto compartido

Alberto Durán defendió que Fundación ONCE busque aliados como Afammer para “ayudar a sacar a las mujeres con discapacidad de un entorno del que no siempre es fácil salir y a integrarlas en el mercado laboral... Seguro que no va ser fácil, pero nos ponemos ya a trabajar para conseguir resultados”. La alianza cuenta con los 36 años de experiencia intentando dar visibilidad a las mujeres que viven en los pueblos de España que atesora Affamer y con el aval “de 185.000 mujeres inscritas que formamos parte, además, de quince entidades internacionales”, explicó Quintanilla. Por parte de Inserta Empleo se cuenta con sus 32 delegaciones distribuidas por todo el Estado, que van a contar ahora con un partner asesor inmejorable para la atención a la mujer.

Además, gracias a este acuerdo se promoverá la accesibilidad universal y el diseño para todos,  para  la supresión de todo tipo de barreras, especialmente las físicas, mentales, tecnológicas y de la comunicación, que impiden o dificultan la plena integración de las personas con discapacidad y sus familias, en especial de las mujeres con discapacidad del ámbito rural. En concreto, el convenio prevé impulsar acciones para mejorar la accesibilidad a bienes y servicios a través de las nuevas tecnologías. 

También de contempla la promoción de acciones conjuntas de difusión y sensibilización social, como la participación conjunta en las ferias y eventos que Afammer organice en favor de las familias y mujeres del ámbito rural, tales como Día Internacional de la Mujer o el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, aspecto en el que se pondrá especial atención en lo que pueda afectar a las mujeres con discapacidad del ámbito rural, como explicó Teresa Palahí (0,16 MB).

El convenio se impulsa en puertas del próximo Día Internacional de la Mujer, jornada para la que la ONU ha elegido el tema ‘Mujeres rurales, mujeres iguales’.