El CRE de la ONCE en Santiago arranca la conmemoración de su 75 aniversario con una “experiencia a ciegas”
Incluyó una presentación multisensorial del mundo de la camelia y un almuerzo con los comensales privados de visión
El pasado 1 de febrero, el CRE de la ONCE en Pontevedra acogió a un grupo de medio centenar de ciudadanos para disfrutar de “Una experiencia a ciegas”, acto con el que se quiso dar banderazo de salida a la 
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La iniciativa, la primera de este tipo que vivían la mayoría de los congregados, les permitió percibir olores y sabores desde una nueva dimensión (privados del sentido de la vista) al igual que en su manejo en la mesa a la hora de comer y degustar el sabroso menú elaborado por el profesorado y alumnos del CIFP Carlos Oroza, con el que el CRE de la ONCE mantiene una histórica colaboración, con los profesores Francisco Orge (cocina), Manuel Patiño (repostería), Manuel Cordido (panadería) y Tina Vázquez (servicio de comedor) a la cabeza.
En total se sentaron a la mesa 50 personas -representantes de los más diversos sectores sociales pontevedreses-, 40 de ellas provistas de antifaz para impedirles cualquier tipo de visión. Entre ellos se encontraban la presidenta de la Diputación, Carmela Silva; la subdelegada del Gobierno, Ana María Ortiz; la concelleira de Benestar, Anxos Riveiro; la presidenta del Pontevedra C.F., Lupe Murillo; o la decana de la Facultad de Bellas Artes, Silvia García. Los invitados fueron recibidos por el equipo directivo de ONCE Galicia, encabezado por el delegado territorial, Manuel Martínez; el presidente del Consejo Territorial, Carlos Fernández; y el anfitrión y director del CRE, José Ángel Abraldes.
Aroma de camelias
Antes del almuerzo, los miembros del grupo, provistos de antifaces y guiados por alumnos del Ciclo de Guía, Información y Asistencia Turísticas del Carlos Oroza, asistieron a una presentación multisensorial del mundo de la camelia, proyecto que desarrolla ese centro de formación pontevedrés desde hace dos años bajo el lema “A nosa camelia, tan curiosa como saborosa”, y que acaba de recibir otro premio de innovación tecnológica.
A continuación, participaron de la ‘comida a ciegas’ en el comedor del CRE, compuesta por dos entrantes y tres platos principales; los primeros también con la camelia como protagonista clave de su elaboración: una esfera de yogur con aroma de camelia y una tosta de bacalao con aceite de camelia ahumado con madera también de camelia.
Finalizada la comida y retirados los antifaces, se hizo una reflexión colectiva de lo que supuso la experiencia, en la que todos los participantes reconocieron más desconcierto y desorientación de la que imaginaban a la hora de localizar cubiertos, vasos, pan y de identificar los productos que contenía cada plato.