Estás en:

EDITORIAL

Aproximación a los nativos digitales

Si existe una clave que explique la historia de éxito que constituyen las ocho décadas de vida de la ONCE, ésa es -sin duda- la sana complicidad mantenida con el conjunto de la ciudadanía, plasmada en su contacto diario, a pie de calle, con las personas ciegas y con otros tipos de discapacidad. Una corriente en dos direcciones, marcada por la simpatía, el respeto y la valoración de una histórica tarea social de solidaridad sin parangón en otras latitudes... Una labor, común actualmente a todas las áreas del Grupo Social ONCE, pero que tuvo su origen y mantiene como su motor más destacado ese momento en el que los ciudadanos se acercan al vendedor del cupón de su barrio, o al que tiene un quiosco junto a su puesto de trabajo, y charlan, comentan, intercambian pareceres y... adquieren alguno de los productos de juego responsable que comercializa. En esa sencilla transacción, el comprador deposita unas gotas de ilusión pensando en que la fortuna puede sonreírle con un premio y, además, es consciente de que está realizando esa ‘apuesta cómplice’ para apoyar unos objetivos ligados a la solidaridad y la igualdad entre todas las personas.

Más información