EDITORIAL
Aval europeo a la dimensión del Grupo Social ONCE
Consciente del reto de futuro que suponía para su proyecto institucional, hace años que el Grupo Social ONCE viene trabajando en, por y para Europa. Ha recibido en nuestro país la visita de los principales comisarios comunitarios del área social y de delegaciones del Europarlamento interesadas en conocer su tarea inclusiva en materia de formación, empleo y -en definitiva- integración en la sociedad de las personas con discapacidad. Pero también ha estado, y está cotidianamente presente en Bruselas, donde participa activamente en reuniones, ofrece mediación, asesoramiento y consultoría, y pone a disposición de las instituciones europeas su amplia experiencia en este terreno. Aquí y allí viene recibiendo el unánime reconocimiento de las autoridades comunitarias y el apoyo y ánimo expresos para perseverar en esa labor. Pero la UE no se ha limitado al elogio de esta trayectoria. Pasando de las palabras a los hechos, la Comisión ha depositado su plena confianza en la Organización -en concreto a través de Fundación ONCE-, concediéndole la cogestión en España de los ingresos del Fondo Social Europeo dirigidos a integración laboral, consiguiendo multiplicar su efectividad en el ámbito de la formación y el empleo. Al punto de situar a nuestro país a la cabeza europea de los índices de inclusión en los últimos años.