Los hosteleros cordobeses se han comprometido con el Ayuntamiento de la Ciudad de los Califas y con la ONCE local para mejorar su formación y práctica -y la de sus empleados- en la atención a sus clientes con discapacidad visual. Un objetivo que el municipio se ha comprometido a cubrir también, en un futuro próximo, en lo que respecta a los funcionarios locales.

El Consistorio hizo público el acuerdo con la Asociación de Empresarios de Hostelería de Córdoba (Hostecor), el pasado 23 de noviembre, tras la reunión celebrada en la sede de la ONCE local, en la que la directora del centro, Carmen Aguilera, actuó como anfitriona. Se anunció así como primera medida que en enero próximo se realizarán una serie de cursos prácticos en los locales de los propios asociados a Hostecor; y los impartirán técnicos aportados gratuitamente por la ONCE para garantizar la adecuación de los contenidos y del método de enseñanza a las necesidades objetivas de este tipo de usuarios.

El objetivo es que los hosteleros aprendan a dirigirse a este perfil de usuarios de sus servicios, e incluso a resolver cualquier posible problema puntual asociado a la  discapacidad visual del cliente, porque -como defendió el delegado de Inclusión y Accesibilidad del Ayuntamiento, Bernardo Jordano- a menudo en esta problemática “hay más prejuicios psicológicos que otra cosa, cuando las personas con discapacidad sólo nos reclaman que actuemos con ellos con normalidad”. De hecho, el representante municipal expresó su esperanza en que cunda este ejemplo y otros sectores comerciales y profesionales se incorporen a la iniciativa, animados por el anuncio de Hostecor de impulsar otra formación similar, ésta sobre lengua de signos, para mejorar la atención a las personas sordas.