Prueba subjetiva de exploración auditiva, cuyo objetivo es la identificación del umbral audiométrico. Consiste en el uso del juego para motivar al niño a colaborar en la realización de una audiometría tonal, mediante la realización de una determinada actividad lúdica como respuesta a un estímulo sonoro normalmente enviado a través de auriculares o vibrador óseo, o bien a través de altavoz si se quiere evaluar la respuesta de una prótesis. Se realiza en habitación insonorizada o cabina audiológica espaciosa que permita desarrollar al niño la actividad que facilite la respuesta, y por personal experto en la realización de la misma, que se aproxima ya a una audiometría tonal convencional.