ULAC aprueba una profunda renovación generacional en su Asamblea de Uruguay
Montevideo (Uruguay) se convirtió, del 24 al 27 de abril, en capital latinoamericana de las personas ciegas con la celebración de la Asamblea General de la Unión Latinoamericana de Ciegos (ULAC) y, en paralelo, del VIII Congreso Latinoamericano de Ciegos (Programa del Congreso en formato pdf). Una Asamblea General que supuso un profundo cambio y rejuvenecimiento de la estructura directiva de ULAC, con no pocas sorpresas y novedades, como nos comentaba a su regreso la consejera general ejecutiva de Relaciones Internacionales y Expansión Exterior del Consejo General de la ONCE, Ana Peláez, que encabezó la delegación española.
La ONCE y su Fundación para la solidaridad con las personas ciegas de América Latina (FOAL) han mantenido una presencia y cooperación directa desde la creación, en 1985, de la organización transnacional de las personas ciegas en aquel continente, ULAC, y en especial a partir de 2004, con el convenio suscrito por ésta con FOAL. Así, en su condición de único ‘miembro internacional’, ONCE-FOAL tienen presencia con voz y sin voto en la Asamblea y participan igualmente en sus órganos de gobierno, tanto en el Comité Ejecutivo como en la Junta Directiva. La Asamblea de Montevideo respondió al reflejo de las condiciones que, para bien y para mal, caracterizan a este movimiento en América Latina: las diferentes orientaciones de las organizaciones representadas, la atomización de las delegaciones nacionales, en muchos casos integradas por miembros de diferentes asociaciones...; y, al tiempo, el empuje y pujanza de unos representantes entregados y comprometidos con el movimiento. Una Organización, en definitiva, caracterizada por su diversidad, en palabras de Ana Peláez (archivo mp3).
Sus Asambleas resultan por todo ello a menudo imprevisibles, y la de este año no ha defraudado a la hora de votar la composición de los nuevos órganos rectores. Así, junto al reelegido presidente Volmir Raimondi (de Brasil) y al nuevo vicepresidente 1º (y hasta hora secretario general) Fernando Galarraga (Argentina), completan la Directiva tres jóvenes mujeres ciegas sin experiencia previa de gestión, en los puestos de vicepresidenta 2ª, secretaria general y tesorera. Un peso de la juventud y la mujer que no es casual, pues ULAC ya había anunciado que para financiar el traslado de dos de los cuatro miembros que puede acreditar cada delegación nacional, éstas deberían contar con al menos un joven y una mujer en su composición. Fruto de ello, con ese sustancial incremento de presencia femenina en la Asamblea, ULAC ha decidido disolver el Foro de Mujeres que hasta ahora venía a garantizar la presencia e influencia de la mujer en sus iniciativas y orientaciones.
La representante española no ocultaba su sensación de expectación ante este nuevo marco, en la esperanza de que la Unión sepa afrontar los endémicos problemas de atomización que le caracterizan y la orientación a menudo poco predecible de sus decisiones, pese a la aparente bisoñez de buena parte de su equipo de gobierno electo. Porque -nos explicaba- América Latina, pese a esos problemas, siempre los ha contrarrestado a partir del entusiasmo y el compromiso (archivo mp3).
Un aliado permanente
La delegación española, que compartió las jornadas asamblearias con más de 400 delegados, pudo compartir en Uruguay sus importantes proyectos en marcha en la región través de FOAL. Especial dimensión adquieren los desarrollados en los ámbitos formativo y de incorporación al empleo (en este caso de la mano sobre todo de los Proyectos Ágora de inclusión laboral). Una tarea en la que Ana Peláez remarcaba la importancia de incorporar (junto a otras colaboraciones solidarias) la “corresponsabilidad de los gobiernos locales”, porque -señala- es la única forma de que estas iniciativas perduren en el tiempo y sus posibles avances no se queden en ‘flor de un día’.
En materia educativa se lamentaba de que, pese a los esfuerzos y medios dedicados, “lamentablemente no llegamos al 20% de escolarización entre los niños y niñas ciegos de la región” (archivo mp3).
Y por lo que respecta al empleo, Peláez hace hincapié en la necesidad de una previa formación laboral, como la que FOAL lleva años intentando poner en pie, ya en 16 de los 19 países del área, en la esperanza de completar muy pronto este círculo de progreso (archivo mp3).
La consejera general de la ONCE termina dibujando estos campos de cooperación de FOAL con la región, recordando su tarea de defensa de los derechos humanos de las personas ciegas y con otros tipos de discapacidad de Latinoamérica. Fundamentalmente a través del apoyo, reforzamiento y contribución a su unidad de las múltiples asociaciones en que se agrupan en la región.
Congreso y Exposición
La delegación española, en la que -junto a Ana Peláez- se encontraban el director técnico de Relaciones Internacionales de la ONCE, Javier Güemes, la directora general de FOAL, Mª Jesús Varela, y el director corporativo de RSC, Comunicación y Marketing de nuestro grupo de empresas sociales ILUNION, Fernando Riaño, pudo también conocer la muestra tiflotécnica ‘EXPOULAC 2016’ y las sesiones del VIII Congreso Latinoamericano de Ciegos, montados en paralelo a la Asamblea en Montevideo.
El Congreso -convocado bajo el eslogan “Conocer para crecer: Nuestro protagonismo hace la diferencia”- contó con cuatro ejes fundamentados en promocionar la participación de las personas ciegas y con baja visión, “en el entendido de que la inclusión se construye colectiva y conjuntamente con todos los actores sociales”.
La grave grieta del terremoto ecuatoriano
Los delegados españoles se entrevistaron en Montevideo, entre otros representantes del área, con Mario Purancajas, presidente de la Federación Nacional de Ciegos de Ecuador, todavía muy afectado por el desastre derivado del seísmo acaecido en la zona costera del país el pasado 16 de abril: “Hay un antes y un después de esa fecha dramática, que dejó 800 muertos y más de 8.000 heridos... También, claro, para los discapacitados visuales”, señaló el presidente ecuatoriano, al tiempo que reconocía la rápida reacción de un equipo del programa Ágora (que impulsa FOAL en su país) para contribuir a las tareas de apoyo y cooperación con los damnificados (archivo mp3).
Purancajas reconoce que la recuperación y la rehabilitación de los destrozos provocados por el enorme terremoto serán tareas complejas y de lenta ejecución. Y agradece la rápida cooperación de múltiples organismos internacionales que reaccionaron al desastre, y muy especialmente de la ONCE y de FOAL, que -reconoce- siempre responden a las demandas del colectivo de personas ciegas de Ecuador (archivo mp3).