Sevilla acoge el I Foro Social de Mujeres con Discapacidad
Sólo desde un mayor empoderamiento de la mujer con discapacidad se puede luchar por sus derechos de igualdad. Esta ha sido una de las principales conclusiones del I Foro Social de Mujeres con Discapacidad celebrado en Sevilla el 16 y 17 de noviembre, organizado por la Fundación CERMI Mujeres
, con el apoyo y colaboración del Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de Andalucía (CERMI Andalucía), y entidades públicas y privadas, como la Junta de Andalucía, Fundación ONCE, Telefónica, Iberdrola y AC Hoteles.
Durante las dos jornadas se celebraron ponencias y mesas de debate y reflexión divididas en bloques temáticos como ‘La igualdad y no discriminación de las mujeres con discapacidad desde un enfoque interseccional’, ‘La creación de redes y estructuras para el empoderamiento de las mujeres y niñas con discapacidad’, ‘Las mujeres con discapacidad en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y en la Agenda 2030’ y, finalmente, ‘La construcción de una agenda política de las mujeres con discapacidad’, en las que diferentes mujeres debatieron sobre la situación actual de la mujer con discapacidad y de las barreras que encuentran debido a su doble discriminación.
La inauguración oficial corrió a cargo de la consejera andaluza de Igualdad y Políticas Sociales, Mª José Sánchez, y de la directora del Instituto Andaluz de la Mujer, Elena Ruiz, que junto a los organizadores del encuentro, representados por el presidente del CERMI Andalucía, José Manuel Porras, y la vicepresidenta ejecutiva de la Fundación CERMI Mujeres (FCM), Ana Peláez, coincidieron en la necesidad de poner en marcha políticas orientadas a alcanzar una "igualdad real” entre hombres y mujeres y acabar con la violencia de género, trabajando para ello desde el ámbito político, en el plano local, autonómico, nacional y europeo.
Doble discriminación
Mientras, la directora del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM
), Elena Ruiz, expresó la “fortaleza” de la mujer, poniendo de manifiesto su capacidad de lucha contra la “doble discriminación” en el caso concreto de las mujeres con discapacidad.
Posteriormente, la enviada especial de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y Accesibilidad, Mª Soledad Cisternas, ofreció la conferencia marco ‘Los derechos humanos de las mujeres con discapacidad: Análisis global de la cuestión’, en la que subrayó que “el derecho debe buscar un marco regulatorio en el que nos movamos las personas”. Si no existiera el derecho, ha dicho, viviríamos en “una selva... Y aún con una regulación de los derechos humanos, todavía hay sectores de población que sufren discriminación, como el de la mujer”, advirtió.
Por su parte, la responsable de Derechos Humanos del Foro Europeo de la Discapacidad (EDF
), An-Sofie Leenknecht, durante la conferencia temática ‘La igualdad y no discriminación de las mujeres con discapacidad desde un enfoque interseccional’, recordó que “los gobiernos europeos tienen el deber y la obligación de contar con las mujeres con discapacidad en todos los órdenes de la vida y sobre todo en la toma de decisiones”. Y con ese propósito, el de revertir la situación en la que se encuentra la mujer con discapacidad, manifestó que trabaja desde el EDF, una organización de la que forman parte el CERMI y la ONCE desde hace muchos años.
Tras la intervención de otras responsables del ámbito de la mujer, como la secretaria general de Fundación ONCE, Teresa Palahí, la coordinadora de programas y responsable del área de mujer en la Federación Plena Inclusión Madrid, Rebeca Tur; la presidenta de la Comisión de Diversidades Sexuales (LGTBI) y Discapacidad del CERMI Estatal, Rocío Pérez; o Marina Martín, representante de la Comisión de la Mujer de la Federación de Asociaciones de Personas Sordociegas de España (FASOCIDE), entre otras de casi una decena de entidades ligadas al ámbito de la mujer, el Foro concluyó con un llamamiento a todas las participantes en el evento, para que no dejen de luchar por la igualdad de derechos de las mujeres con discapacidad.
En la clausura, el director general de Personas con Discapacidad de la Junta de Andalucía, Gonzalo Rivas, destacó la importancia de este tipo de eventos para eliminar los prejuicios que pesan sobre las personas con discapacidad y, con mucha mayor virulencia, sobre las mujeres. Rivas afirmó que “es importante que las mujeres con discapacidad no participen sola y exclusivamente en los órganos de decisión de las propias entidades del sector de la discapacidad, sino también en todos los sectores que constituyen una sociedad”. Por su parte, la secretaria general de CERMI Mujeres y directora ejecutiva del CERMI, Pilar Villarino, celebró el “éxito rotundo” de este foro de Sevilla y anunció la previsión de repetirlo en 2018 y 2019.
Concentración cívica contra las esterilizaciones forzadas
Uno de los platos fuertes de este foro ha sido la concentración cívica organizada por la Fundación CERMI Mujeres el 16 noviembre por la tarde ante el Palacio de San Telmo, sede del Gobierno andaluz, para denunciar las esterilizaciones forzadas que todavía sufren muchas mujeres y niñas con discapacidad en todo el mundo, incluidas España y Europa.
Durante la concentración se leyó un manifiesto de la FCM con motivo del Día internacional de la Violencia contra las Mujeres, que se celebra cada 25 de noviembre, en el que argumenta que la esterilización forzada es una forma de violencia contra las mujeres que debe ser erradicada y condenada enérgicamente por las autoridades competentes, ya que sigue siendo un hecho que continúa produciéndose “ante la total pasividad de la sociedad”. “En el mundo miles de mujeres y niñas con discapacidad siguen siendo esterilizadas sin su consentimiento ante la total pasividad del resto de la sociedad”, refleja el manifiesto.
Según la FCM, “estos actos equivalen a la tortura y a los tratos inhumanos o degradantes, y deben ser perseguidos y castigados”. En este sentido, el documento denuncia que se trata de actos que mutilan no sólo sus cuerpos sino también sus derechos, quedando expuestas atrozmente ante la violencia y el abuso, y sin posibilidad de acceder a la justicia para defenderse.
Por último se destacó el derecho de las mujeres con discapacidad a decidir sobre sus cuerpos: “Ninguna persona, ninguna autoridad, ni ningún poder pueden arrogarse el derecho de decidir sobre él”, recalca el documento.