Francia califica el modelo de inclusión español como ejemplo a seguir
La responsable francesa de Discapacidad, Sophie Cluzel, conoce en directo el sistema socioeducativo y laboral que impulsa el Grupo Social ONCE
“El modelo de inclusión social de la discapacidad en España, liderado por el Grupo Social ONCE, es un buen ejemplo para transformar la situación de los 12 millones de personas con discapacidad en Francia”. Con esta reflexión concluía su visita a nuestro país la secretaria de Estado de Personas con Discapacidad de Francia, Sophie Cluzel, los pasados 22 y 23 de febrero, tras mantener un encuentro con responsables del Grupo Social ONCE, en la sede del Centro de Recursos Educativos (CRE) de la ONCE en Madrid.
La vicepresidenta del Consejo General de la ONCE de Asuntos Sociales, Patricia Sanz, el consejero general adjunto al presidente, de Cooperación y Relaciones Institucionales, presidente de ILUNION y vicepresidente ejecutivo de Fundación, Alberto Durán, y la consejera general de Relaciones Internacionales y Expansión Exterior de la ONCE, Ana Peláez, encabezaron la delegación con la que Cluzel mantuvo una intensa jornada de trabajo, en la que se le presentó el modelo de atención educativa, formación y empleo para personas con discapacidad visual de la ONCE; el papel de la Fundación ONCE como gestor del Programa Operativo de Lucha Contra la Discriminación del Fondo Social Europeo a través de la formación y el empleo para personas con discapacidad; y el compromiso con el empleo de las personas con discapacidad del grupo socioempresarial ILUNION.
Con el objetivo de comparar las distintas formas de inclusión de las personas con discapacidad tanto en la escuela como en la empresa, su visita a España ha sido muy esclarecedora. “Quiero saber, a través del ejemplo español, y de otros que visitaré en el futuro, cómo podemos transformar más y mejor el sistema francés hacia la inclusión de las personas con discapacidad en el ámbito educativo y laboral. Por eso tenía mucho interés en encontrarme con la ONCE y con ILUNION y saber cómo lo están haciendo”, manifestaba 
(0,19 MB)tras la reunión.
En la actualidad, y desde hace 30 años, Francia mantiene una ley de cuotas del 6 %, que en el ámbito de la empresa privada alcanza un índice del 3,5 %. “Tenemos que reforzar más nuestro sistema en las empresas y para eso hemos de conocer las posibles palancas e incentivos para mejorar las posibilidades de contratación de las personas con discapacidad que otros desarrollan”, añadió (0,21 MB) Cluzel. En este sentido, el modelo laboral en el que el Grupo Social ONCE lleva trabajando desde hace años resulta, en su opinión (0,17 MB), “único”. “Aunque todavía necesito conocerlo mejor -aseguraba-, y en el caso de ILUNION ver cuáles son las palancas económicas, la fiscalidad, los incentivos a las empresas y las ayudas a los puestos de trabajo, creo que es un modelo único y muy interesante”.
Educación de calidad
Cluzel también se mostró gratamente sorprendida por cómo la ONCE viene trabajando la inclusión educativa de sus 7.500 alumnos ciegos o con grave discapacidad visual, incluidas las personas sordociegas. En su opinión (0,24 MB), se trata de un modelo de gran calidad educativa para estos alumnos: “En España la cultura de la educación inclusiva es mucho más natural. Vemos que llevan mucho tiempo trabajando en la formación de los docentes y educadores, también en la mirada de la sociedad hacia las personas con discapacidad... Se trata de un modelo de escuela de calidad que es mucho más inclusiva que en en la mayoría de los países”.
Tras la reunión, la responsable de la Discapacidad del gobierno francés, cuya Secretaría depende del primer ministro galo, tuvo la oportunidad de visitar las aulas de música y de sordoceguera del CRE madrileño de la ONCE e intercambiar opiniones tanto con los docentes, algunos de ellos ciegos totales, como con los alumnos.
De esta manera, conoció muy de cerca el rol que desempeñan estos centros de recursos educativos de la ONCE. “La mayor dificultad en Francia es cambiar la mirada hacia la persona con discapacidad y para eso tenemos que darle visibilidad -explica Cluzel (0,43 MB)-. Tenemos un sistema institucional que ha hecho un buen trabajo pero, a la vez, ha protegido demasiado a las personas con discapacidad, y por eso creo que no hemos trabajado lo suficiente sobre el entorno para facilitar esa inclusión. La discapacidad todavía da miedo en Francia. Tenemos que tranquilizar a las personas que tienen una situación de discapacidad y a la sociedad en general para que sepan que pueden acudir a los entornos ordinarios con un apoyo adecuado”.
La Convención de Derechos de las Personas 
con Discapacidad de la ONU y los Objetivos de Desarrollo Sostenible son también los parámetros internacionales de su actuación política. “Tanto el presidente de la República como el primer ministro tienen una clara voluntad de hacer cumplir estos parámetros internacionales. Estamos trabajando por un cambio completo de paradigma, precisamente para que la persona con discapacidad sea un ciudadano pleno y ejerza y disfrute todos sus derechos”, concluyó (0,41 MB).
Un objetivo, para el que Alberto Durán ofreció a Cluzel todo tipo de colaboración: “Creo que lo que la secretaria de Estado está haciendo tendrá muy buenos frutos en el futuro y nosotros estaremos ahí por si nos necesita”, dijo. (0,37 MB)
Encuentro con el CERMI
Un día antes, la secretaria de Estado había mantenido en la también madrileña sede del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) un encuentro con sus máximos responsables para abordar algunas de las cuestiones más acuciantes de la agenda política de la discapacidad de España y del país galo. El CERMI presentó a Cluzel su labor de incidencia política en favor de la mejora de la calidad de vida de los cuatro millones de personas con discapacidad que residen en nuestro país y sus familias. Y entre los temas abordados mencionó la lucha contra la violencia machista, que afecta de forma más intensa a las mujeres que tienen algún tipo de discapacidad, y la exigencia de que se acabe con la exclusión del derecho al voto que sufren unas 100.000 personas por razón de discapacidad intelectual, psicosocial o cognitiva en España. Un tema coincidente con la agenda francesa, ya que en Francia hay unas 300.000 personas privadas del derecho de sufragio por razón de discapacidad. En esta línea, Cluzel lamentó que todavía exista una importante falta de accesibilidad en los procesos electorales, como sucede por ejemplo con los programas que los diferentes partidos elaboran y distribuyen para los diferentes comicios.
La relevancia de la financiación europea para proyectos en favor de la discapacidad y el recordatorio al Gobierno francés de que su país acogerá en 2019 el Congreso Mundial de Personas Sordas fueron otros asuntos planteados por los representantes del CERMI Estatal a la representante francesa. Cluzel, por su parte, hizo especial hincapié en la importancia de que se muestre a la sociedad una imagen positiva de las personas con discapacidad, con especial atención a los medios de comunicación y resaltó la necesidad de garantizar los derechos afectivo-sexuales de las personas con discapacidad, especialmente de las mujeres.
Finalmente, ambas partes acordaron establecer un contacto fluido de cara al futuro que sirva como vía de intercambio de buenas prácticas para promover iniciativas que redunden en beneficio de las personas con discapacidad.
Mercedes Leal