El consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, mantuvo, el pasado 4 de febrero, un encuentro con representantes de la ONCE en el que les trasladó información sobre el reciente anuncio de creación de una ‘Mesa del Juego Responsable de Castilla y León’ y solicitó la puesta en común de mecanismos de trabajo para avanzar en el objetivo del juego responsable en esa Comunidad.

Ibáñez, acompañado de su director de Relaciones Institucionales, Máximo López, se reunió con el delegado territorial de la ONCE en Castilla y León, Ismael Pérez, al que también acompañaban el consejero general de la ONCE y coordinador de Juego y Asuntos Económicos, Eugenio Prieto, y el jefe del Gabinete Jurídico, Ángel Montero.

En el encuentro se puso de manifiesto que el cupón y los demás productos de juego de la ONCE actúan bajo el amparo de la Ley 13/2001, de 27 de mayo, sobre regulación del juego, y son, por tanto, de competencia estatal, por lo que no entran en el ámbito competencial de Juego en el que actúa la Consejería de la Presidencia. No obstante, en la reunión se resaltó la incidencia de las nuevas tendencias del juego y la preocupación de ofrecer al público globalmente un juego responsable. Al respecto, los responsables de la ONCE incidieron en que los vendedores de la Organización reciben formación sobre esta materia y le ofrecieron a la Administración autonómica la aportación de su experiencia en cuantos aspectos puedan resultarle positivos.

El consejero de Presidencia les anunció por su parte la próxima convocatoria de la ‘Mesa del Juego Responsable de Castilla y León’, de carácter consultivo, en la que, desde un análisis sosegado y con datos, se va a abordar un debate sobre las futuras líneas de actuación que afectan a la regulación del juego. En esta mesa estará representada la Administración autonómica (a través de las consejerías de Presidencia, Sanidad, Educación y Familia e Igualdad de Oportunidades); las organizaciones de los distintos subsectores de Juego (casinos, bingos, salones de juego y máquinas); los sindicatos que representan a los trabajadores de estas empresas; las asociaciones de jugadores rehabilitados; la Federación Regional de Municipios y Provincias y la Federación de asociaciones vecinales.

En la reunión se acordó mantener una línea de actuación conjunta y cercana en todas aquellas materias que afectan tanto a la Consejería de la Presidencia como a la ONCE. Además, se destacó la incidencia económica y social de la ONCE en Castilla y León, con 770 trabajadores, de los que el 75% son empleos fijos. Asimismo, se expuso que la ONCE realiza una gran labor en servicios sociales especializados, atendiendo a una población afiliada que está en torno a 4.200 personas, siendo una organización que actúa como auténtico agente fijador de población al tener su actuación en amplias zonas de la comunidad autónoma, muchas de ellas en el ámbito rural. En este sentido, se ha destacado el compromiso con todas las provincias de Castilla y León, con la intención de reabrir las sedes de Ávila, Soria y Zamora, lo que fue muy positivamente valorado por el propio consejero.