La ONCE abre nuevos programas de Voluntariado en el ámbito internacional y en el de asistencia a  menores o usuarios de perros guía

En España existen más de 2,7 millones de personas que movidos por sus ideas, valores, solidaridad, o por la necesidad de hacer algo útil o las ganas de cambiar el mundo, participan como voluntarios en los diversos programas que organizaciones, entidades e instituciones públicas y privadas tienen en marcha. A finales de 2019, de esos más de dos millones y medio, 2.853 eran voluntarios en la ONCE -716 más que el año anterior-, de los que el 15% son personas con discapacidad, la mayoría (el 11%) ciegas o con grave discapacidad visual, y afiliadas por tanto a la propia Organización. Un 'ejército humanitario', el de voluntarios y voluntarias, que crece considerablemente cada año, a la vez que lo hace el número de servicios que prestan: el 2019 se cerró con la realización de 74.300 servicios a 4.537 afiliados y afiliadas, un 47% más que en 2018, según ha explicado a esta revista 'Así Somos' el director general adjunto de Servicios Sociales para Afiliados de la ONCE, Andrés Ramos. (1,50 MB)

La ONCE se constituyó como Entidad de Voluntariado en el Estado español en 2011. Desde entonces -en apenas nueve años- y con la experiencia acumulada en cuanto a la gestión del servicio, la detección de nuevas demandas de sus usuarios, la promulgación de la nueva Ley de Voluntariado de 2015, y la necesidad de fomentar la colaboración y solidaridad con las personas ciegas de otros países, se ha hecho necesario actualizar su Servicio de Voluntariado y la normativa que lo regula (0,15 MB), que desde este mes de febrero ofrece a sus voluntarios actuales y futuros nuevas tareas.

Voluntariado internacional

Tras casi 20 años en marcha, los buenos resultados de este servicio han propiciado, pues, su ampliación a través de nuevos programas y subprogramas, dirigidos a un mayor número de potenciales beneficiarios. Ahora la renovada normativa elimina el programa de 'Experiencia Profesional' pero crea otros nuevos de gran interés como el programa de “Voluntariado Internacional” con los subprogramas de 'Inclusión Educativa', 'Formación e Inclusión laboral' y 'Fortalecimiento del movimiento asociativo de personas con discapacidad visual'. Aunque la ONCE ya tenía abierto, a través de su Fundación solidaria con las personas ciegas de América Latina (FOAL), un programa de voluntariado técnico para contribuir a la mejora del contexto social, económico, cultural e institucional de las personas con discapacidad visual más desfavorecidas de la Región latinoamericana y de sus organizaciones representativas, en coherencia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, ahora lo hace extensivo a otras zonas del mundo en las que el Grupo Social ONCE está presente, como nos explicaba el responsable de Servicios Sociales (0,82 MB).

De hecho, el voluntariado internacional supondrá nuevas oportunidades para que trabajadores y afiliados del Grupo canalicen su acción solidaria en el ámbito de la cooperación, según Javier Güemes (1,15 MB), director de Relaciones Internacionales del Grupo Social ONCE. Dicho voluntariado "servirá para dar un apoyo profesional y específico en diversas materias y ámbitos" apunta (1,00 MB),  y es "requisito indispensable el dominar algunos idiomas como el francés o el inglés", explica (1,09 MB) el responsable del ámbito internacional. 

Así, podrán colaborar como voluntarios de este programa aquellos profesionales conocedores del funcionamiento y gestión de los Servicios de la ONCE y se requerirá experiencia en cooperación internacional y conocimientos mínimos nivel B1 de inglés y/o francés, además de aprobar el oportuno módulo formativo interno sobre voluntariado internacional.

Perros guía y menores

Las familias de afiliados y afiliadas con hijos menores o que sean usuarios/as de perros guía se constituyen también con la nueva reglamentación en nuevos sujetos de atención por parte del programa de Voluntariado de la ONCE. 

Por un lado, el programa de “Acompañamiento” se ha ampliado con la creación del subprograma de Perros Guía. Su finalidad es cubrir el déficit de apoyos necesarios de los afiliados usuarios de perros guía para desarrollar la actividad supervisada de ejercicio físico y esparcimiento al aire libre de estos perros tan especiales; una dimensión muy importante y necesaria para el correcto y saludable mantenimiento del perro, y en la que la persona afiliada a la que presta servicio puede requerir del apoyo de algún adulto que desee cooperar en este terreno. En este caso, el voluntario acompañará al afiliado y al perro guía, supervisando que este último no se salga del espacio delimitado para su esparcimiento, no incurra en incidencias con otros animales o personas o que no coma nada que no debe.

Asimismo, dentro del programa “Recreativo/Cultural” nace un nuevo subprograma, el de 'Apoyo a familias'. Este subprograma ofrece a las familias con hijos menores de edad (con o sin discapacidad), en las que los dos progenitores o el único progenitor en caso de familias monoparentales sean personas afiliadas a la ONCE, la posibilidad de contar con una persona voluntaria que les acompañe y les preste apoyo a la hora de realizar salidas con sus hijos: paseos familiares, zoo, parques de atracciones, actividades culturales en familia, excursiones, etc., como explica Ramos (1,01 MB).

Tendrán prioridad de atención en este subprograma los progenitores sin resto visual funcional. Y en este caso, al prestar los voluntarios el servicio a los padres la responsabilidad de los menores recaerá sobre estos últimos. No asumirán, ademas, nunca tareas propias del cuidado de los menores, como alimentarlos, vestirlos, cambiarles el pañal, etc. Para participar en este subprograma deberán aportar, en cualquier caso y a modo de garantía, la certificación negativa del Registro Central de Penados por delitos contra la libertad e indemnidad sexual, trata y explotación de menores.

Básicamente, las actividades a realizar por los voluntarios en este terreno serán las siguientes:

• Dar indicaciones al menor sobre lo que puede ver a su alrededor.
• Mantener controlado visualmente al menor dando indicaciones a sus padres sobre dónde se encuentra y qué hace.
• Advertir a los padres de posibles peligros en el entorno, para que éstos avisen a sus hijos.
• Identificar las rutas más seguras para los menores en caso de paseos.

Asimismo, en cuanto la población de menores afiliados, el programa contempla la posibilidad de realizar otra nueva tarea, que contará siempre con la supervisión de un profesional de la ONCE, en actividades educativas o deportivas que se realicen en los centros de la ONCE, y en las que los voluntarios prestarán apoyo a los técnicos, profesores y educadores de la Organización, en la supervisión y asistencia a los menores afiliados, según explica Ramos (0,89 MB).

Nuevas tecnologías

Asimismo, anuncia (0,85 MB) la incorporación del subprograma de 'Voluntariado digital', dentro del programa de “Acceso a la Información”, para apoyar y orientar (de forma presencial o telefónica) a los afiliados que tengan dificultades en el manejo básico de  Internet (gestiones online, descarga de apps, de libros en la Biblioteca Digital ONCE...), o bien en redes sociales, así como el refuerzo en el uso de herramientas informáticas (dispositivos táctiles, móviles o cualquier dispositivo Smart), teniendo en cuenta que previamente deben haber recibido atención por parte de los servicios de atención personal de la ONCE en materia de Comunicación y Acceso a la Información. 

Y por último se crea un nuevo programa de "Difusión/Tutorización” con los dos subprogramas específicos del mismo nombre. Su finalidad es, por tanto, promover el propio servicio de Voluntariado a través de la difusión del mismo, así como facilitar a los nuevos voluntarios su incorporación al servicio en la fase inicial.

En definitiva, esta ampliación de programas quiere seguir la estela del nuevo impulso que ya se dio durante el pasado mandato a este servicio de Voluntariado, según explica Ramos (0,97 MB), y que durante el actual periodo cuatrienal responde a las nuevas necesidades que van planteando los afiliados y afiliadas de la Organización, fundamentalmente personas ciegas totales, personas sordociegas, mayores que residen solos, y -en su mayoría- de ámbitos geográficos alejados, dadas sus dificultades para acceder a determinados servicios o desarrollar actividades de la vida diaria. “Que el Voluntariado tenga más fuerza y presencia nos ayudará a implementar nuevos o importantes proyectos como 'A tu lado siempre' o el Plan ONCERCA”, vaticina Ramos (0,97 MB). 

La nueva normativa establece por todo ello la inclusión con carácter general de los directores de Agencia como 'colaboradores de Voluntariado', con vistas a garantizar la extensión y correcto funcionamiento de este servicio en todos los ámbitos territoriales con presencia de la ONCE. Además, cada Delegación Territorial y Dirección de Zona (conjuntamente con sus Direcciones de Apoyo y Agencias) se encargarán de elaborar un Plan Anual de Voluntariado, en el que figure tanto el conjunto de acciones a desarrollar como los objetivos a alcanzar, que servirá para establecer la dotación eficiente y de calidad del servicio.

Beneficio mutuo

Aprender, sentirse útil, ser solidario, compartir experiencias y conocimientos... Las motivaciones que pueden llevar a cualquier persona a realizar una tarea de voluntariado pueden ser éstas... y muchas otras, pero todas ellas coinciden en que el beneficio, tanto para los que realizan este altruista servicio como para los que lo reciben, es mutuo.

Así lo manifiestan Roberto Valbuena, Elisa Santos y Belén López, tres de nuestros voluntarios y voluntarias, personas motivadas más por la satisfacción que produce esta tarea que por la responsabilidad que conlleva acompañar a personas ciegas que necesitan ayuda para hacer algunas cosas en su vida cotidiana. Y así de claro lo manifiesta Roberto (0,69 MB), voluntario de 75 años, que viene realizando esta labor desde hace ya 20 años en la ONCE. 

Jubilado a los 55 años, Roberto se planteó desde el principio de esa nueva etapa de su vida que necesitaba hacer algo útil por los demás. Y tras informarse de los diversos programas de Voluntariado existentes, acabó en el de la ONCE: “desde entonces he acompañado a cientos de personas afiliadas”, nos cuenta (0,69 MB).

Elisa, por su parte, con 68 años, se apuntó también como voluntaria al iniciar su etapa como jubilada, aunque ya tenía experiencia (0,64 MB) como colaboradora de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Su labor consiste ahora, fundamentalmente, en acompañar a los afiliados y afiliadas a consultas médicas, sobre todo a hospitales, porque en su opinión (0,69 MB) “son espacios muy complicados para su orientación y movilidad”. También realiza acompañamientos culturales, a exposiciones, conciertos o visitas... Se trata de una tarea que le aporta mucho más de lo que ella da, nos explica (0,79 MB).

Y Belén, más joven pero ya con experiencia como voluntaria durante tres meses en Mozambique (1,04 MB), colaborando con una Fundación que presta asistencia sanitaria (ella estudió Enfermería), llegó a la ONCE el pasado año, empujada por su inquietud solidaria hacia los demás y porque en su familia ya había casos de personas con discapacidad visual, nos cuenta (0,88 MB). En coincidencia con el resto, para Belén (0,97 MB) lo más importante es lo que esta tarea le aporta, sobre todo en el plano emocional .

La acción altruista que realizan, junto al resto de los más de 2.800 voluntarios que conforman este gran 'ejército humanitario' en la ONCE, es por todo ello más que valorada por sus usuarios. Y Florentina Llordén, ciega total, es una de ellas. Tiene más de 70 años, y ella misma fue voluntaria (1,00 MB), desde 1998 hasta 2017. Piensa, por su experiencia, que el servicio es una de las mejores prestaciones que ofrece la ONCE a sus afiliados y afiliadas; “le doy un 9”, calificándolo de 0 a 10, “por no decir que es perfecto”, nos dice (0,18 MB). El acompañamiento, sobre todo a consultas médicas, es uno de los apoyos que hoy por hoy se ha hecho más imprescindible, en su opinión (0,53 MB), dada la cada vez mayor cantidad de personas mayores afiliadas y en situación de soledad en muchos casos. “Para mí, el Voluntariado es lo mejor que puede haber en la ONCE”, asegura (0,63 MB).

Junto a Florentina, para  María José Martín, ciega total, la atención y el cariño de los voluntarios que la ayudan y acompañan "no se paga con nada", asegura (0,27 MB). Ella es beneficiaria  de este servicio desde hace 12 años y aunque hasta ahora ha venido utilizándolo para consultas médicas y papeleo, ahora, como usuaria de perro guía, la creación del nuevo subprograma específico para este grupo de afiliados le va a venir muy bien, afirma convencida. (1,59 MB)

En definitiva, se trata de personas que merecen sin duda, cada una, el premio al Voluntario del Año que la ONCE creó el pasado mandato para reconocer y agradecer públicamente la labor de todos ellos. No obstante, seguro que en este sentido la mayoría se suman al pensamiento de Roberto (0,58 MB): "el premio me lo dan las personas con las que voy cada día, porque me enseñan a vivir de otra manera" .

Mercedes Leal