Mediante la firma de un convenio entre el conselleiro Román Rodríguez y el delegado territorial de la Organización, Manuel Martínez Pan

La Xunta de Galicia  y la ONCE han renovado, un año más, la colaboración para prestar atención especializada a alumnado con discapacidad visual en centros educativos de toda Galicia, en total 336 estudiantes.

El conselleiro de Cultura, Educación y Universidad, Román Rodríguez, y el delegado territorial de la ONCE en Galicia, Manuel Martínez Pan, firmaron una adenda al convenio que lleva vigente desde el año 2013 y que hace posible que seis profesores del cuerpo de maestros desarrollen sus tareas profesionales en los equipos específicos de la ONCE, prestándole apoyo al alumnado ciego o con discapacidad visual, tanto en Educación Primaria y 1º y 2º de la ESO, como en centros y unidades de Educación Especial.

El Gobierno gallego destina a este convenio un total de 245.000€ para el presente curso 2021/22, lo que permite la dotación tanto de personal como de recursos especializados en este ámbito.

La ONCE, por su parte, pone a disposición de la comunidad educativa un equipo de una treintena de especialistas (entre maestros, trabajadores sociales, psicólogos y profesionales vinculados al deporte y a la música entre otros) para atender al alumnado que lo precise, así como sus servicios especializados como los de escolarización combinada, de formación, de investigación o de adaptación de recursos didácticos y tecnológicos.

Recursos tecnológicos

Así pues, al amparo de este acuerdo se facilita el apoyo y el acceso del alumnado con discapacidad visual escolarizado en centros ordinarios a los recursos tecnológicos y a la transcripción y grabación a braille de los libros de textos y de los materiales curriculares. De este modo se favorece su inclusión educativa, a la par que una atención especializada e idónea a sus necesidades.

En concreto, el convenio permite establecer un marco de colaboración para la atención educativa del alumnado con ceguera o deficiencia visual grave, así como de sus familias y de los centros educativos a los que asistan; promover la coordinación de los servicios educativos y de los complementarios, organizando y haciendo rentables los recursos de las diferentes instituciones; y facilitar la conformación de equipos específicos para la atención educativa a este alumnado.