‘El perfume del vino, experiencia olfativa’, nueva propuesta de cultura inclusiva del Museo Tiflológico de la ONCE
Un grupo de personas ciegas han podido participar de esta actividad que ha unido gusto, olfato, tacto y obras de arte
Zarzuela, ópera, música clásica, una nana en alemán, lecturas de autores clásicos griegos, de La Biblia o de Dante… todo para que un grupo de personas ciegas o con baja visión disfrutara de ‘El perfume del vino, experiencia olfativa’, una actividad inclusiva que unió oído, gusto, olfato, tacto y obras de arte del Museo Tiflológico de la ONCE, el pasado 17 de marzo.
‘El perfume del vino, experiencia olfativa’ ha consistido en una actividad única de carácter científico, literario, artístico y filosófico que se ha iniciado con una introducción sobre los aromas en la que, mediante unas tiras de papel -como las que dan con los perfumes- las personas ciegas han tratado de diferenciar esencias y, paralelamente, contrastar con el sentido del gusto a través de una copa de vino.
Buscar algunos de los aromas de esas tiras a la hora de degustar el vino ha sido otro de los ejercicios que han realizado las personas participantes en esta actividad que Miriam Tendero, una de ellas, calificaba como “totalmente diferente, con una mezcla de sensaciones olfativas, gustativas, auditivas, todas a la vez, y completado con el tacto”, a la hora de tocar las obras que Pedro José Pradillo mostraba en su exposición ‘Alfa y Omega. Pecados y Virtudes’, para relacionar los aromas y lo detectado con el gusto con estas obras de arte, tal como ella misma explica (0,53 MB).
Para Encarna Moreno, que iba acompañada de su perra guía, y que era la primera vez que disfrutaba de una de estas experiencias, “ha sido un conjunto divino, entre la música, la narrativa, los aromas y la degustación, ha sido increíble”. (0,42 MB).
La actividad ‘El perfume del vino’ surgió de la “necesidad de democratizar el vino, su cultura y el arte”, afirmaba Hosanna Peña, organizadora de esta experiencia, que también señalaba que “uno de nuestros objetivos es ser inclusivos, y por eso estamos en el Museo Tiflológico”, así lo contaba a Así Somos (0,64 MB).
Durante esta experiencia sensorial, las personas ciegas o con baja visión iban recibían las indicaciones de uno de los organizadores que los animaba a encontrar esos aromas y unirlos al vino y a la música -ópera o zarzuela-, que estaban escuchando (4,32 MB). Además, todas las personas asistentes contaban con información en braille sobre la actividad que estaban disfrutando y que finalizó con el brindis de la zarzuela ‘Marina’
(4,95 MB).
Antonio Saugar