El Foro Europeo de las Personas con Discapacidad (EDF)  presentó el 7 de abril, ante el Comité de la ONU en Ginebra, su informe alternativo respecto a la implementación en Europa de la Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. El EDF reclama que se incluya a todas las instituciones europeas y Estados miembro para alcanzar un ‘Pacto Europeo por la Discapacidad’ que se enmarque en una estrategia económica comunitaria que tenga en cuenta los derechos de quienes conforman este colectivo.

Según su informe, en la actualidad no existe a escala europea una estructura de participación y consulta para que las personas con discapacidad y sus entidades representativas puedan impulsar y valorar el grado real de implementación de la Convención de la ONU. Tampoco se dispone de los recursos y organización necesarios para que ésta se haga realidad; y, en general -denuncian-, los europeos con discapacidad carecen de instrumentos de participación específicos para implicarse en los procesos de decisión de la UE que afectan al propio colectivo.

El Foro denuncia además que la UE no haya impulsado sobre este tema ninguna campaña de concienciación, iniciativa que considera indispensable para concienciar a toda la población europea.

Acta de Accesibilidad 

En otro orden de cosas, el EDF ha solicitado además a la UE la adopción de la anunciada Acta Europea de Accesibilidad que dé cobertura a áreas como el entorno construido, transportes, servicios de emergencia, o TIC, instando a la Unión Europea a asegurar la protección contra la discriminación para todas las personas con discapacidad en ámbitos como la educación, la protección social, la salud y el acceso a los bienes y servicios. Una reivindicación que, apenas unos días después, sería asumida por la comisaria de Empleo y Asuntos Sociales de la UE, Marianne Thyssen, ante una delegación de la ONCE en Bruselas (como informamos en este mismo boletín).

También solicita el EDF la  financiación de servicios y apoyos de la UE que faciliten el derecho a vivir de forma independiente de todas las personas con discapacidad, así como la puesta en marcha de una política europea de discapacidad y un plan de acción; y apela a luchar contra todas las formas de discriminación y a que los Estados miembro adopten directrices que aseguren que las personas con discapacidad reciben el apoyo necesario.

La UE ratificó en 2010 la Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, primer Tratado internacional ratificado por una organización regional. Así se comprometía a dar pasos importantes en favor de la igualdad de derechos y la plena inclusión de las personas con discapacidad en todas las áreas de la vida. El pasado año tuvo ya que enviar al Comité de la ONU que realiza el seguimiento del cumplimiento del Tratado un informe con las acciones que estaba llevando a cabo a favor de los 80 millones de europeos con discapacidad.