La ONCE se unió un año más -esta vez bajo el lema “Tocar es comunicar”- a la conmemoración del Día Internacional de las Personas con Sordoceguera, el 27 de junio, fecha conmemorativa del nacimiento de la estadounidense Helen Keller, la primera persona con sordoceguera que luchó por los derechos de las personas que presentaban esta compleja discapacidad. Lo hizo con diversas iniciativas y un acto central desarrollado en Madrid, junto a su Fundación para la Atención a Personas con Sordoceguera (FOAPS), la Asociación Española de Personas con Sordoceguera (ASOCIDE) y la Asociación Española de Familias de Personas con Sordoceguera (APASCIDE). Todas ellas han querido aprovechar la efeméride para visibilizar y reivindicar en común la necesidad de este colectivo de interactuar a través del tacto como su principal vía de comunicación. Además, la ONCE dedicó a la jornada su cupón de ese sábado 27.

La popular “Carrera de los cascabeles” que cada año organiza la ONCE en San Sebastián, celebró el pasado sábado 27 de junio una edición muy especial, al coincidir con el Día Internacional de las Personas Sordociegas (del que informamos en este mismo número) y haberse consagrado por ello a esta doble discapacidad; de modo que los participantes no sólo corrieron con un antifaz que les privaba del sentido de la vista, sino también con unos tapones que dificultaban su audición. Tradicionalmente, la carrera se disputa por parejas que van unidas por un cordel y portando un cascabel reivindicativo. En cada pareja, uno hace de guía y el otro lleva los ojos tapados por un antifaz, con lo que se simula la forma en que practican el atletismo las personas ciegas.

El pasado 22 de junio se celebró en Madrid la Asamblea Ordinaria 2015 del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), en la que el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, resaltó el trabajo que desarrollan las organizaciones del tercer sector en España, un esfuerzo -dijo- “anterior incluso a la España constitucional”. Señaló también que los problemas deben verse como ”una ventana para la oportunidad”, especialmente en un momento que calificó de “apasionante” por los retos sociales que tenemos por delante. Entre ellos significó el de seguir avanzando en la igualdad de todas las personas en el acceso a los servicios sociales, con independencia de la Comunidad Autónoma en que residan.