Clubes Braille: una década extendiendo el sistema de lecto escritura de las personas ciegas
Como cada 4 de enero, se ha conmemorado en todo el mundo el Día Internacional del Braille, en coincidencia con el aniversario del nacimiento de su inventor, Louis Braille
(1809-1852). La ONCE, principal impulsora a escala mundial de la versión en lengua española de este código de lectoescritura ideado para su manejo por las personas ciegas, lo ha hecho además como homenaje a los 10 años de existencia y trabajo de sus Clubes Braille para extender y popularizar el “sistema de los seis puntos” que ideara el legendario docente francés, tras perder él mismo la visión siendo apenas un niño.
A lo largo de sus 80 años de historia, la ONCE ha impulsado una labor histórica en este terreno, afincada en primer lugar en sus pioneros centros educativos y extendida luego a través de la denominada Comisión Braille Española (CBE), que sólo en 2017 realizó, por ejemplo, más de 400 asesoramientos en etiquetado de bienes y servicios a empresas e instituciones interesadas en hacer accesibles sus productos a toda la población, incluidas las personas ciegas o con grave deficiencia visual.
Una tarea que se ha puesto de manifiesto en los múltiples actos e iniciativas impulsados por la Organización a través de sus delegaciones y centros con ocasión de este Día Internacional, materializados en exposiciones de materiales de lectoescritura braille, algunas tan originales como la llevada a cabo por la Dirección de Apoyo de la ONCE en Córdoba bajo el eslogan “Del punzón a la arroba”, un recorrido histórico por la evolución del propio sistema y de las herramientas a través de las que se plasma, hoy plenamente integradas en el ámbito digital.
Los Clubes
Pero efectivamente este año se ha querido rendir especial homenaje a los 10 años de la creación de los Clubes Braille de la ONCE, una de las iniciativas más exitosas de la entidad para propiciar la extensión de este sistema de lectoescritura fundamentada en la cercanía al usuario, en primer lugar las personas ciegas, pero también todos aquellas otras interesadas en conocer y manejar este código que ha sido indispensable durante los dos últimos siglos para que nuestro colectivo haya podido incorporarse al tren de la educación, la cultura y el ocio, y al ejercicio de derechos tan fundamentales como el acceso al voto o a la información legal, administrativa, etc.
Actualmente, existen unos 40 Clubes Braille
(0,01 MB) gestionados por la ONCE en toda España, con presencia en todas las comunidades autónomas, en los que los afiliados a la ONCE y el resto de la ciudadanía puedan conocer y disfrutar de este código de lectoescritura desde todos sus ángulos: el educativo, el cultural, el uso del braille en la vida cotidiana, en el ocio y en muchas otras vertientes. Ello ha permitido al braille incorporarse a los ámbitos universitarios o de las bibliotecas públicas, extenderse en el etiquetado de un altísimo porcentaje de los medicamentos, productos sanitarios, alimenticios y de limpieza, incorporarse a las cartas de muchos restaurantes o a las botoneras de los ascensores..., en lo que supone una evidente mejora de la vida cotidiana de las personas ciegas, que apenas cabía suponer hace apenas una década, cuando se pusieron en marcha los primeros Clubes Braille por toda España.
En este tiempo, los Clubes han estructurado más de 30 tipos de actividades diferentes, en el objetivo común de extender el uso y su conocimiento del braille. Entre las que destacan los cursos de instrucción dirigidos a personas del entorno de los afiliados y afiliadas de la ONCE (familiares, amigos o formadores). Pero también la participación en eventos como el Día del Libro o la Semana de la Discapacidad, así como la organización de exposiciones y jornadas específicas de puertas abiertas, en los centros de la propia Organización, que concitan siempre curiosidad e interés entre escolares y adultos que, al acercarse a este código de lectoescritura, comprueban en propia piel la originalidad y, al tiempo, la relativa sencillez de un sistema que se les antojaba ‘mágico’.
CBE, la ‘RAE del braille’
Por lo que respecta a la Comisión Braille Española (CBE) es el órgano que -auspiciado por la ONCE- ostenta la máxima autoridad en España para la fijación de normas de uso y desarrollo del sistema braille de lectoescritura, así como la simbología en relieve y color aplicable a láminas o cualquier otro producto utilizable por las personas ciegas o con discapacidad visual.
Creada en 1984, su principal objetivo es salvaguardar y desarrollar todo lo referido al sistema de lectoescritura que identifica a las personas con discapacidad visual, y que les permite participar en igualdad de oportunidades en casi todos los campos, incluidos el educativo, el profesional y el cultural.
La CBE establece normas para la correcta transcripción al braille de documentos en distintas materias; normas para confeccionar materiales accesibles en relieve (mapas, planos, señales, pictogramas, etc.); y recomendaciones a distintos sectores para incluir el braille en sus productos y servicios (etiquetado de envases, marcas en braille en distintos soportes, etc.). Además, forma parte y es agente especialmente activo de la Comisión Iberoamericana del Braille, que coordina la plasmación y normalización de las reglas de este código universal en su aplicación en nuestra lengua. Labor cooperativa que ha permitido avanzar en un nuevo Código Matemático Unificado, junto a los países de Latinoamérica; la confección de directrices para la elaboración de mapas físicos en relieve, braille y macrocaracteres, o en normas de adaptación de métodos de aprendizaje de idiomas, entre otros temas.
Durante el año 2017, la CBE realizó más de 400 asesoramientos a otras tantas empresas e instituciones que se interesaron por hacer más accesibles sus productos y servicios, especialmente en el ámbito del etiquetado de productos y también de la señalética de edificios, planos, etc.
Quienes quieran conocer más sobre el braille o, incluso, aprenderlo, pueden consultar el correspondiente apartado de la web de la ONCE.